monica alvaro

Opinión

La sonrisa del Sr.Burns

Portaveu adjunta de Compromís

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Lo dice Montoro, con esa media sonrisa que recuerda Mr. Burns: la recuperación económica inminente comporta la bajada de la prima de riesgo, retorno de la estabilidad a los mercados, el selectivo IBEX-35, es positiva la tasa interannual. Lo puedes leer en los diarios: datos y más datos, cifras y más cifras. Pero aún así, todavía no he podido ver esa alegría, esa estabilidad, en los ojos de ninguna persona que me haya encontrado por la calle.

Algo falla. Y la Comisión Europea ha puesto negro sobre blanco esas cifras que yo no veo en las personas. España es el tercer Estado de la Unión Europea en desigualdad, empatado con Grecia. Sólo superado por Rumanía y Bulgaria. Ahora ya podemos decir con las mismas cifras oficiales, de las cuales nos habla Montoro, que no es una crisis, sino que es una estafa. Que se han rescatado las fortunas de los más ricos al mismo tiempo que se ha dejado caer la gente humilde. Que el 20% más rico en España gana 6,6 veces más que el 20% más pobre, una diferencia que es casi el doble que en la República Checa.

En España se rescataron bancos con el dinero de quienes sufríamos los recortes. Unos 60.000 millones de euros -un 4,3% del PIB- que el Gobierno recientemente ha dado por perdidos, a pesar de que sabemos perfectamente donde están: en los balances contables de quienes jugaron a la ruleta con la burbuja de la baldosa y después nos han hecho pagar la resaca al resto. Si no los buscan, si no los reclaman, es porque no quieren. Mientras tanto, en Alemania -el segundo estado de la UE que más dinero ha perdido con el rescate bancario- la factura ha sido del 1,3%; en el Reino Unido del 0,6%; en Italia sólo del 0,2%, mientras que Francia incluso ha recuperado dinero!

Según los indicadores sociales de la UE, España se encuentra en situación crítica en desigualdad de rentas, como hemos visto, y en abandono escolar, con una tasa del 19% que casi dobla la media europea, que es del 10%. Se encuentra también bajo vigilancia en riesgo de pobreza o exclusión social, jóvenes que no estudian ni trabajan o la eficacia del gasto social para reducir la pobreza. Un panorama que nos sitúa a la cola de la Europa social y nos aleja de los Estados más eficientes y desarrollados como Alemania, Suecia o Dinamarca, los cuales miramos, aquellos y aquellas a quienes nos importa el bienestar de las personas, con mucha distancia y cierta envidia.

Yo, que vengo de letras puras, recuerdo que "Economía" viene del griego y quiere decir "administración del hogar". Por eso mismo no puedo ni quiero concebir una casa en la cual se gestiona sin pensar en quienes viven. Podrá ser muchas cosas, pero no cumplirá la función más básica que tiene que tener, la de hacernos sentir cómodos, a gusto: "como en casa".

Por eso, personas que hemos estudiado griego o simplemente personas que piensan en personas y entienden esto de la economía más allá de hacer felices a los bancos, han conseguido que desde 2015, se haya reducido el riesgo de pobreza en el País Valenciano un 6,9% y que seamos uno de los territorios que más avanza: porque tenemos un gobierno que ha puesto a las personas en el centro de sus políticas. Y por eso estamos trabajando duro para poner en marcha cuanto antes mejor la Renta Valenciana de Inclusión, un instrumento muy potente para construir un horizonte de vida digna para todos y todas, una herramienta para la igualdad. Porque no pensamos en cifras y datos, pensamos en caras y ojos. Y no damos nada por perdido; seguimos rescatando personas antes de que bancos. Queda mucho trabajo pendiente -y tanto-; pero, por delante las cifras, están las personas, aquellas que todavía no sonríen; y que, cuando lo hacen, su sonrisa no nos hiela la sangre como cuando vemos la sonrisa gris del señor Burns.

Mònica Álvaro,Portavoz adjunta de Compromís a las Cortes

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