Si todo el mundo tiene opinión y todo el mundo puede emitirla libremente es lógico que en su día surgiera la figura del troll. Se llama troll a este usuario que crea cuentas falsas para insultar o criticar sin ánimo constructivo a otros usuarios y figuras públicas.
El problema de los trolls pasa cuando son legión y cuando hay personas que parecen dedicarse a esta tarea como si se tratara de un trabajo.
Es por este motivo que una de las redes dónde con más frecuencia campean de los trolls, es decir Twitter, ha decidido tomar cartas en el asunto. Así, la red del pájaro ha lanzado una actualización en la cual será más sencillo bloquear un troll. Se trata de una serie de filtros en las notificaciones que hacen posible silenciar cuentas nuevas y bloquear a personas que a pesar de que no siguen el afectado por los insultos disparan sus calumnias contra este.
Para poder activar estos filtros antitroll, tan sólo hay que acceder a la pestaña de notificaciones de nuestra cuenta a Twitter y allá configurar cuáles son nuestros filtros.
Más allá de la persecución que la página web pueda hacer de este tipo de personas que sólo tienen como objetivo sabotear la red social, tendríamos que preguntarnos lo porque de su existencia. Qué necesidad hay de crear cuentas falsas para insultar alguien? Por qué no es posible el debate basado en las ideas y no en el ruido? La misma esencia de Twitter incentiva la existencia de los trolls? Son cuestiones que tendríamos que preguntarnos como sociedad.