La Diputación de Valencia es la responsable del mantenimiento y la obra nueva en una red viaria de 1.800 kilómetros, dividida en seis demarcaciones. El Área de Carreteras que dirige Pablo Seguí cuenta con un presupuesto anual cercano a los 40 millones de euros e invierte tanto en nueva construcción como en la mejora y la conservación de las infraestructuras existentes.
Con la llegada de los nuevos gestores, se han establecido una serie de prioridades que pasan por la modernización del Área de Carreteras y un cambio en el modelo que “prescinde de las obras faraónicas para centrarse en la conservación y la calidad de las infraestructuras existentes y el refuerzo de la seguridad vial, con la eliminación de puntos de tráfico conflictivo”, según explica el diputado Pablo Seguí.
Seguí, en la línea de actuación del equipo de gobierno que preside Jorge Rodríguez, ha fijado como objetivo “devolver el prestigio a Carreteras con transparencia y portando la bandera de la ética a la hora de gestionar un área muy compleja que vertebra el territorio de la provincia”.
Sistema de control de datos
En cuanto a la modernización, el presidente fue testigo de la implantación de un novedoso sistema de control de datos que permite seguir al minuto el estado de las actuaciones que se emprenden en Carreteras, desde el estado de licitación o ejecución de una obra a las consultas de los alcaldes o técnicos municipales que hacen una solicitud o exponen sus dudas a los responsables del departamento.
Sobre la modernización en la gestión se basa la hoja de ruta para los próximos cuatro años, más allá de la legislatura para evitar que este plan de trabajo sea cortoplacista. También ha habido renovación en la jefatura del área, al frente de la cual está Javier Piedra, que avanza “la era de la conservación para trabajar en la calidad y el mantenimiento que aporte un valor añadido a las carreteras”.
Mayor seguridad en las carretas
Otras de las prioridades que apuntan Seguí y Piedra son el programa de Seguridad Vial para perseguir el objetivo de cero accidentes en las carreteras provinciales y prestar especial atención a peatones, ciclistas y usuarios del transporte público a la hora de acometer los distintos proyectos del área. Las vías ciclistas y peatonales serán otro de los puntos fuertes de las obras de carreteras de la presente legislatura.
Los técnicos de Carreteras han expuesto al presidente, en su visita al área, los principales proyectos de los próximos años, fruto de un exhaustivo análisis de la prioridad de las actuaciones. “Primero definimos qué red de carreteras queremos y después fijamos en qué puntos y cómo se va a ir actuando en los próximos años, teniendo en cuenta que un proyecto tarda tres años desde que se toma la decisión de llevarlo adelante hasta que se puede ejecutar”, detalla Javier Piedra.
Retos a medio plazo
Entre los retos del Área que dirige Pablo Seguí está acabar con los puntos negros de la red viaria provincial; desarrollar un programa de seguridad vial que analice los datos de siniestralidad de la DGT y trabaje en la prevención; apostar por obras “que lleguen a todas las comarcas dando respuesta a reivindicaciones vecinales”; y un cambio en los pliegos para que el factor económico sea prioritario, “pagando el precio justo por las carreteras”.
En palabras del presidente de la Diputación, Jorge Rodríguez, “es un lujo poder tener un plan de actuación fijado para los próximos cuatro años y trabajar con eficiencia para conseguir que se invierta todo lo presupuestado”. Los técnicos de Carreteras han mostrado su satisfacción por la visita del presidente, ya que la mayor parte “no había recibido nunca la visita de un presidente de la Diputación”.