El diputado de Carreteras, Pablo Seguí, ha mantenido una reunión de trabajo con la alcaldesa de Favara, Oro Azorín, y miembros de su equipo de gobierno para plantear el desarrollo de actuaciones de mejora de la seguridad vial en el entorno de la travesía de la CV-510, en tanto en cuanto continúan los trabajos para poder desarrollar la futura variante, un proyecto que la Diputación de Valencia no ha abandonado, a pesar de las dificultades técnicas para llevarlo a cabo. “Somos conscientes de la dificultad que tiene Favara para conciliar el tráfico con el día a día de los vecinos y vecinas y, por ello, si bien hemos abordado en la reunión el estado de situación de la futura variante de nuestra carretera, nos hemos centrado precisamente en mejorar la seguridad vial en ese día a día”, ha explicado Seguí.
El diputado de Carreteras, quien ha acudido a la reunión acompañado de los responsables técnicos de su departamento, ha recordado que desde el Servicio de Conservación se han realizado ya algunas actuaciones en materia de seguridad vial, como la creación y mejora de pasos de peatones, y que ahora se quiere dar un paso más allá para mejorar la accesibilidad, regularizar con semáforos algunos puntos e incluso mejorar el sistema de drenaje de la vía.
“Nos hemos comprometido – ha detallado Seguí– a elaborar un plan de actuaciones que sea una realidad de aquí a final de año, de forma que logremos una mejora sustancial de la seguridad vial en el entorno de nuestra carretera y minimicemos de este modo la problemática a la que se enfrentan los vecinos y vecinas”.
Uno de los puntos que será objeto de estudio especial en el marco de este plan, según se ha abordado en la reunión, será la zona en la que confluyen ambas carreteras, y que actualmente está solucionado con una intersección en T. “Estamos en conversaciones con el Ministerio, para hacer en este punto una rotonda que dé mayor fluidez y seguridad al tráfico pero, según nos han trasladado, eso no podrá ser antes de que acaben las obras de su variante para lo que marcan el horizonte de 2020”, ha asegurado el titular de Carreteras de la Diputación.
En la actualidad, dos son las carreteras que atraviesan el municipio de Favara: de un lado, la N-332, con una densidad de circulación de 22.000 vehículos diarios, y del otro, la CV-510, de titularidad provincial, por la que pasan una media de 6.000 vehículos al día. Si bien la variante de la N-332 ya está en fase de construcción, el diputado de Carreteras ha explicado que el desarrollo de una vía alternativa a la CV-510 se está encontrando en su tramitación con dos problemas principales: de un lado, dificultades medioambientales que condicionan el trazado y las condiciones constructivas y, del otro, el encaje con la salida del peaje de la AP-7, que depende del Ministerio de Fomento, cuyos responsables posponen cualquier posible actuación relativa a la CV-510 a la finalización de su variante.
“A pesar de las dificultades que se nos plantean, seguimos empeñados en sacar adelante este proyecto, pero mientras no nos quedaremos parados y seguiremos ejecutando aquellas actuaciones que sean necesarias para aumentar la seguridad de los vecinos y vecinas de Favara”, ha concluido Seguí.