La militancia de Joves PV - Compromís se posicionó por unanimidad en contra de la reconstrucción urbanística de la costa valenciana en su Congreso Nacional el pasado sábado. De esta manera, la juventud valencianista responde al debate que se ha dado a partir de los efectos devastadores del temporal de hace unas semanas y defiende una posición de renaturalizaicón y recuperación de los ecosistemas dunares de las playas valencianas.
“El litoral valenciano ha sufrido un proceso de urbanización masiva que ha comportado la degradación del paisaje natural y que supone un riesgo para la población establecida en las zonas construidas sin ninguna planificación racional”, afirma el documento aprobado el pasado sábado. Cargan, además, contra el modelo económico del litoral valenciano basado en un turismo que “ha cambiado en pocas décadas el sistema económico tradicional de la agricultura y la pesca de las poblaciones costeras hacia un modelo de servicios, incapaz de superar la temporalidad y la precariedad”.
Una de las voces que defendió la postura, finalmente aprobada por la militancia, fue Roser Viñoles, concejala joven por Compromís en Sueca: “sé que hay mucha gente que depende del turismo que atraen nuestras playas, pero si continuamos así no quedarán playas. Es un sistema que se autodestruye porque no sabe respetar la naturaleza donde actúa”. Viñoles, vecina del Perelló, que también sufrió los efectos de Gloria, se une así a la reflexión que hacían otras localidades afectadas.
“Primero fue con la DANA en el Bajo Segura y ahora Gloria, pero vendrán más”, afirmaba la concejala joven de Sueca. En el documento de Joves PV, propuesto inicialmente por el colectivo del Alacantí, se argumenta que con la crisis climática actual, los temporales y las precipitaciones torrenciales serán cada vez más frecuentes. La DANA del Bajo Segura ya evidenció que la urbanización descontrolada en antiguos barrancos y en la plana aluvial del río Segura fueron determinantes para explicar las inundaciones que se dieron en el sur valenciano. Con Gloria han sido los paseos marítimos y otros edificaciones al lado del mar. “La destrucción de elementos de la costa nos avisa del error de haber destruido las barreras naturales y haber construido en zonas que impiden los ciclos naturales”, aseguran desde la organización joven. Además, proponen regenerar la costa como espacio natural, recuperando los ecosistemas característicos de las playas mediterráneas como herramienta de adaptación al cambio climático y fomentando la industria pesquera y agrícola.