Del 5 al 9 de marzo, la localidad de Alcàsser ha acogido una nueva edición de las Jornadas Educativas 'Alcàsser emociona'. Una oportunidad única para aprender y compartir estrategias, con el objetivo de mejorar la convivencia y las relaciones con los demás. Y todo esto a través de la educación emocional, una herramienta fundamental que no sólo ayuda a la aceptación de nosotros mismos, sino que además aporta confianza para resolver los retos del día a día y alcanzar nuestras metas.
La idea surgió el año pasado de una demanda explícita de la comunidad educativa basada en la necesidad de mejorar la convivencia a los centros educativos, entre los niños, niñas y jóvenes. No se dudó a la hora de dar respuesta y con este objetivo se diseñó un proyecto que tenía que salir de las aulas, porque la convivencia es cosa de todas y todos.
València Extra ha hablado con Cristina Lucendo, Concejala de Educación, Igualdad y Cultura del Ayuntamiento de Alcàsser, que nos ha explicado el objetivo principal de este proyecto. 'En esta segunda edición, hemos conseguido que más familias se unan a los talleres que realizamos en las Jornadas Educativas. Se tratan de talleres completamente vivenciales, en el que los participantes comparten experiencias y, por supuesto, se trabaja de forma muy práctica y útil la educación emocional. El año pasado, conseguimos llegar al 30% de la población y, este año, lo hemos superado. Las familias pedían abordar la educación emocional, ya que nos permite entendernos mejor entre nosotros'.
Asimismo, Cristina Lucendo ha querido destacar que 'además de trabajar la educación emocional en el colegio, tanto con los alumnos y los profesores, como con los monitores, también se ha trabajado en todos los sectores de la sociedad, es decir, se han implicado las familias, los servicios sociales, los comerciantes y empresarios e, incluso, la policía local. Además, desde el Ayuntamiento también hemos coordinado una acción en la que hemos participado todos los concejales. Y es que este proyecto es un trabajo en red para conseguir que el bienestar en el pueblo cada vez sea mayor. Es una iniciativa transversal y, por tanto, es necesario que tenga un impacto en la sociedad'.
Como novedad, este año, se ha sumado 'el colectivo de personas mayores (yayos y yayas) que han trabajado con jóvenes en una práctica de éxito como es el aprendizaje servicio; la energía de nuestros jóvenes combinada para contagiar y despertar al resto de personas de nuestro pueblo. Hemos apostado también por proyectos con devolución a la comunidad, descubriendo habilidades, implicando nuestros mayores, aprendiendo a tenernos en cuenta, haciendo de alumnos tutores y haciendo una acción artística consistente en un mural en el polideportivo. El próximo reto, trabajar en red a partir de la mesa coordinadora en la Prevención, Detección y Actuación del Bullying'.
Durante esta semana, los participantes han tenido la oportunidad de disfrutar de una experiencia enriquecedora, gracias a las diferentes acciones que han protagonizado tanto alumnos y profesores, como la familia. En definitiva, una comunidad entera implicada y trabajando para crear una sociedad mucho más unida.