Jorge Romero Ariño siempre había dibujado pero lo de dedicarse a la ilustración no era algo que tenía en mente. "Siempre me ha gustado, nunca dejé de dibujar. Estudié filología hispánica por el gusto a la narrativa y al final del último año lo compaginé con un estudio de ilustración profesional en la ESAT en Valencia donde me enseñaron a explotar la forma autodidacta que yo tenía de ilustrar", explica el viñetista a Valencia Extra.
Sin un estilo definido pero con ganas de conocerse a sí mismo, Jorge comenzó a presentarse a concursos y a probar si tenía la constancia necesaria para dedicarse al mundo del dibujo y la ilustración. "Al principio seguía a la gente que me gustaba como dibujaba y a partir de mi paso por la ESAT fue cuando empecé a crearme un estilo propio. Empecé por probarme. Quería saber si tenia el estilo y la perseverancia suficiente para dedicarme a esto. A partir de este momento fue cuando busqué un poco la profesionalización presentándome a concursos, haciendo colaboraciones, aunque lo cierto es que, de momento, lo compagino con otras cosas" explica el dibujante quien añade que a pesar de que este mundo le gusta mucho, "no lo tenía del todo claro así que seguí formándome por la rama de humanidades. Este último año he estado estudiando en Madrid y lo que estoy buscando ahora es compaginar el mundo de las letras con la ilustración. Poder publicar ilustraciones mías y de otros en libros unificando ambos mundos".
De hecho, el mundo del cómic es un viejo conocido para este valenciano que confiesa que comenzó a coleccionar cómics con 12 años y nunca lo ha dejado. "También me gustaría llevar la ilustración al mundo del cómic pero soy consciente de que es más complicado. Necesitas una narrativa personal y dedicarle mucho tiempo. Aunque estoy dibujando con un par de guiones", señala el dibujante.
En cuanto a su estilo, Jorge se define como un ilustrador "con una línea limpia, fina, pero sin ser demasiado concreta. Tengo mucho de influencia del cómic japonés y un poco más con el cómic de autor independiente europeo y valenciano. El color y la composición puede tener más influencia de autores españoles. Voy cogiendo un poco de cada uno hasta ser capaz de definir mi estilo propio".
El humor, el humor ácido, lo humano, la frescura, la originalidad y la chispa definen las viñetas del valenciano ya que busca sorprender al lector y jugar con el humor no demasiado explicito para que el lector piense y saque sus propias conclusiones sobre la actualidad. "Creo que mi estilo puede gustar porque puedo ofrecer algo fresco, pienso bastante las viñetas, que el tema no esté demasiado explotado o visto. Intento sorprender pero jugar con el humor porque la gente actualmente le gusta que los temas le lleguen a través de esta vía. Creo que es una buena forma de llegar a la gente", explica el dibujante de Paterna.