El Consejo Escolar, espacio en el que están representados todos los componentes de la comunidad educativa municipal, ha aprobado en su sesión ordinaria elevar el II informe sobre el mapa escolar de la ciudad a la Conselleria de Educación de la Generalitat. En este encuentro realizado en el edificio de Tabacalera, se han presentado los principales resultados del informe de ‘Zonificación y admisión del alumnado en los centros escolares de la ciudad de València’, realizado por un equipo multidisciplinar de investigación compuesto por 14 profesores y profesoras de la Universidad de València.
El informe se centra en realizar un diagnóstico acerca de los procesos de inscripción y matriculación del alumnado local. Para ello se ha valido de los datos empíricos proporcionados por la Conselleria para analizar el mapa escolar de València. «Es necesario que las políticas públicas se basen en evidencias científicas y no en presupuestos ideológicos. La universidad pública es la institución más adecuada para realizar la investigación porque cuenta con los profesionales capacitados para ellos y el prestigio académico requerido», ha declarado la concejala de Educación y Acción Cultural, María Oliver.
El reglamento del Consejo Escolar establece en su artículo 4.b. la obligatoriedad de que se realice este informe de forma anual. «Sin embargo, hasta esta legislatura, el Consejo Escolar nunca había abordado esta función. La investigación ha contado con los datos proporcionados por la Consellería de Educació. Hay que poner en valor a las universidades públicas y la colaboración entre instituciones, que pueden y deben recurrir a sus saberes para mejorar las políticas municipales», ha señalado la concejala.
El informe considera que «el distrito único es inadecuado para mitigar la segregación escolar». Resalta también entre sus conclusiones que «el criterio más importante en la elección de la escolarización para las familias es la proximidad». «Por lo que esta es el principal mecanismo para garantizar la libertad de elección de centro por parte de las familias y, por tanto, la principal acción de la administración para garantizar un mayor ejercicio de esta libertad de elección es incrementar la cercanía de los centros educativos a sus domicilios», dice el informe.
«EL DISTRITO ÚNICO SEGREGA AL ALUMNADO»
Según el citado informe, «el concepto de segregación escolar hace referencia a una red educativa en que se diferencian los perfiles sociales de su alumnado». Afirma igualmente que «conduce a un tipo de red escolar con un perfil de alumnado homogéneo dentro de los centros y heterogéneo entre los diferentes centros. Es decir, se generan escuelas gueto rompiendo así el ascensor social de la educación y la igualdad de oportunidades, aumentando a su vez la desigualdad social».En el estudio consta que «la segregación escolar analiza la concentración en determinadas escuelas de alumnado cuyas familias tienen unos niveles económicos y culturales más elevados o de escolares procedentes de familias socialmente desfavorecidas, alumnado inmigrante o con necesidades educativas especiales. El fenómeno de la segregación escolar compromete la función de igualación de oportunidades propia de la educación y tiene efectos en los resultados educativos diversos de la comunidad escolar». Además, también contemple que «la segregación escolar reduce las probabilidades de interacción de niños y niñas con iguales de otros contextos sociales y disminuye sus oportunidades en adquirir aptitudes sociales y vitales completas».
Asimismo, el informe explica que «el fenómeno de la segregación escolar socioeconómica compromete gravemente la función de igualación de oportunidades propia de la educación. (..)Uno de ellos es la segregación residencial pero no es el único, la segregación escolar se promueve también desde las decisiones de política de educativa, decisiones tales como el fomento de mecanismos de cuasi-mercado potenciando opciones de elección de centro, el establecimiento de un distrito único o la publicación de rankings de centros atendiendo a los resultados de pruebas estandarizadas externas en centros de Educación Infantil y Primaria y de Educación Secundaria. La delimitación de los distritos escolares en sí misma no resulta».
Por otra parte, el estudio afirma que «la zonificación única (distrito único) para la ciudad de València es inadecuada para garantizar el acceso equitativo a la educación, mitigar la segregación escolar o garantizar el derecho a la elección de centro de todas las familias. Pero una política de zonificación sin acciones específicas que compensen los efectos de la segregación residencial tampoco es la solución para la reducción de la segregación escolar».