Durante los meses de diciembre de 2018 y enero de 2019 el Ayuntamiento de València, con la empresa Sonmerca Valencia S.L., llevó a cabo un barómetro municipal para conocer la opinión ciudadana, en este caso, centrándose en temas de educación y ocupación. Los resultados han sido avanzados esta mañana por el concejal Carlos Galiana.
Se han realizado un total de 2300 entrevistas a pie de calle en la ciudad de València, a personas mayores de 18 años empadronadas en la ciudad, teniendo en cuenta cuotas de sexo, edad y teniendo en cuenta la separación por barrios.
Nivel de estudios y ocupación
En este primer avance, se ha destacado la elevada puntuación en cuanto a la satisfacción entre los usuarios de las instituciones educativas, como la Universidad Popular, con un 8'5; la agencia de ocupación València Activa con 7'2; l'Espai Dones i Igualtat, más desconocido, pero con un 8'8; o los centros de servicio municipales con 8'5.La mayoría de la población no está trabajando actualmente en algo relacionado con lo que estudiaron
El nivel de estudios es uno de los temas en los que se centra el barómetro, en el que no se han encontrado sorpresas al observar que la mayoría de población que no tiene estudios o que únicamente ha acabado los estudios obligatorios se encuentra por encima de los 65 años. Las causas por las que dejaron de estudiar fueron, sobre todo, la necesidad de trabajar (68,1%) o por tener obligaciones familiares (22,5%), destacando el caso de las mujeres. Es interesante que muy poco porcentaje de población dejara los estudios por falta de recursos (7,3%) o por falta de interés en la oferta (4,7%), lo que el Ayuntamiento toma como señal de que los cursos y acciones formativas que se ofrecen están teniendo buena aceptación entre la población.
En cuanto a las razones por las que la gente eligió qué estudios cursar, la opción que más destaca es por gusto o vocación y, en la cola con gran diferencia, por tradición familiar, dando la vuelta a lo que hubiera sido una de las opciones principales hace unos años.
Sin embargo, la gran mayoría de la población en todas las franjas de edad ha contestado que no están trabajando actualmente en algo relacionado con lo que estudiaron: un 68’6% en el caso de los mayores de 65 años; 61’7% en las edades entre 40 y 64 años; y con un ligero descenso, el 57’3% en los menores de 40.
En cuanto a la situación laboral de las personas encuestadas, evidentemente hay grandes variaciones según el nivel de estudios. En el caso de las personas sin estudios, un 70’4% son jubiladas o pensionistas, teniendo en cuenta que la mayoría son personas mayores de 65. En cuanto a personas son títulos universitarios o que han acabado formación profesional de grado medio y/o superior, la tasa de trabajadores por cuenta propia o ajena se encuentra por encima del 60% en todos los casos. Por su parte, la tasa de desempleo está en el 13% entre las personas con formación profesional y en un 7’2% con estudios universitarios.
La ciudadanía también ha valorado qué asignaturas académicas son más importantes, así como cuáles deberían ser añadidas al currículum. Idiomas extranjeros (9’3), tecnología (8’9) y ciencias como las matemáticas y la química (8’7) han sido las más valoradas; siendo la última la religión, con una notable bajada de puntos respecto al resto, solo 3’7 sobre 10. Las competencias que añadirían son valores sociales, educación cívica y valores de conducta, así como más idiomas y educación sexual.
Realización de cursos y actividades
Debido a la amplia oferta del Ayuntamiento en cursos, talleres y actividades formativas, se ha preguntado a la población si han decidido cursar en alguna de estas acciones, en las que destaca un sí del 31% de menores de 40 años, con un ligero descenso al 24’8% de personas entre 40 y 65 años, y un 14’7% en mayores de 65. Sobre todo, han tenido mucho interés los cursos de idiomas y, en segundo lugar, actividades relacionadas con la informática y electrónica. Los motivos de la ciudadanía para no haber realizado ningún curso, han sido sobre todo por falta de tiempo o de interés, de nuevo recalcando que solo el 4’4% de la población no lo ha hecho por razones económicas.El desconocimiento tampoco ha sido un motivo para no apuntarse a los cursos, ya que alrededor del 50% de la población conocían las actividades de los centros de servicios sociales, la Universidad Popular, las Bibliotecas municipales y los centros de personas mayores, incluso de los distintos rangos de edad se observa que los resultados no varían drásticamente.
Las profesiones más valoradas
Por último, el baremo también preguntó por las profesiones consideradas con más y con menos prestigio social. No es sorprendente que la profesión más valorada, con gran diferencia, sea médico, con un 72’5%, seguida a mucha distancia por las ingenierías, y abogados/as, con un 27’7% cada una. Sí es curioso, por ejemplo, la presencia de la profesión de enfermero/a baje hasta los últimos puestos, con solo un 2’8% de prestigio social, así como la aparición en último puesto de influencers y youtubers, con un 1’5%.En el caso de los empleos con menos prestigio social, destaca también con una gran diferencia el personal de limpieza, con un 46’4%, seguida de trabajadores/as del sector primario, como agricultura o minería (20’8%) y camarero/a con el 16’3%.
Los resultados completos que irán publicando a en los próximos días. El miércoles 20 será publicada la información de las tabulaciones según los distritos municipales, el 21 los resultados por edad y sexo, y el 22 los ficheros de microdatos. Se pueden consultar con todo lujo de detalles los resultados a través de la página web de la Oficina de Estadística (www.valencia.es/estadistica), el departamento que ha hecho posible la recaptación y la publicación de estos datos.