El concejal de Hacienda, Ramon Vilar, ha informado este lunes de que el Ayuntamiento ha aprobado la segunda modificación de crédito del Presupuesto de 2019 que consiste en la amortización de 38 millones de euros de deuda financiada con parte del remanente del Tesorería de la liquidación de las cuentas municipales del ejercicio pasado.
Vilar ha precisado que la Ley de estabilidad presupuestaria obliga a destinar los remanentes y superávits de la liquidación del presupuesto a la liquidación de deuda, salvo que se produzca una excepcionalidad en la Ley de acompañamiento de los PGE o mediante un Real Decreto específico.
Por otra parte, se han aprobado dos operaciones de crédito: de 18 millones de euros y otra de 15 millones de euros. La primera estaba recogida en el Presupuesto inical de este año, mientras que la segunda es complementaria a la misma y se destinará a la financiación de proyectos de 2018, fundamentalmente confianciaciados, como es el caso de programas FEDER, ARRU o EDUSI, entre otros.
Al respecto, Vilar ha destacado que la diferencia de 5 millones de euros entre la deuda amortizada y los nuevos créditos que se solicitarán supone una reducción neta de la deuda. De esta manera, ha precisado que al final de este mandato la deuda municipal ascenderá a 430,5 millones de euros, lo que supone una reducción de 16,15 millones con respecto a los 446,65 con los que se liquidó el 2018. Parte de esta reducción son los 5 millones de amortización que se aprobarán en el próximo Pleno.
El edil ha garantizado que la liquidación del presupuesto de 2019 que se aprobará el próximo años se prevé que baje a los 390 millones de euros cuando la previsión incial era que se situara en 409 millones.
En otro orden, ha dado cuenta del trabajo desarrollado por la Delegación para iniciar los trámites de la aprobación de la Ordenanza fiscal reguladora del aprovechamiento especial de dominio público para el alquiler de vehículos compartidos y vehículos de utilización turística con guía o conductor. A este respecto, ha informado de que el Ayuntamiento ha detectado «más de 3.000 motocicletas y ciclomotores que operan en la ciudad desde la alegalidad fiscal».
Ramón Vilar ha anucniado que en breve se iniciará la tramitación de este proyecto de ordenanza que prevé unos precios mínimos anuales aproximados de 60 euros para los patinetes ligeros; 70 euros para los patinetes eléctricos grandes y bicicletas eléctricas; 75 euros para ciclomotores y 82 para motocicletas. Por lo que respecta a los turismos eléctricos, la tasa anual se situaría en 960 euros (con la actual regulación de la ORA) o con 715 euros (con una regulación de la ORA que exente de tarifa a cualquier vehículo eléctrico).
Igualmente, la ordenanza regulará los elementos de uso turístico como son los vehículos tuk-tuk con 100 euros al año por vehículo de hasta cuatro plazas más conductor y 180 euros anuales si es de 4 a 8 plazas más conductor. Finalemente, los segway tendrían que abonar 35 euros al año por unidad y solo se podrán utilizar en grupos de 18 personas como máximo, con guía.
Ramón Vilar ha hecho hincapié en que «no se trata de una tasa recaudatoria sino que tiene como finalidad regular los nuevos modelos emergentes de movilidad urbana».