El conseller de Transparencia, Manuel Alcaraz, ha anunciado este jueves la intención de la Generalitat de aprobar una ley de dación de cuentas "prácticamente inédita en España" para la próxima legislatura, con el objetivo de situar a la Comunitat como "la primera autonomía en legislar sobre esta materia y completar la arquitectura institucional en torno a la transparencia y la integridad".
Así lo ha avanzado durante la presentación del informe de rendición de cuentas 2017-2018 de la Universitat Politècnica de València (UPV), acto en el que ha participado el rector, Francisco José Mora; el consejero de Educación en la delegación permanente de España ante OCDE, Unesco y el Consejo de Europa, Francisco Michavila, y el director de la Cátedra Unesco de Gestión y Política Universitaria de la Politécnica de Madrid, Javier Uceda.
"Estamos ante una experiencia nueva y prácticamente inédita en España, y nos interesa mucho aprender y compartir experiencias relacionadas con la rendición de cuentas porque es un capítulo abierto de cara a la próxima legislatura", ha afirmado Alcaraz, recoge la Generalitat en un comunicado.
Durante su intervención también ha destacado que la rendición de cuentas es "imprescindible para seguir avanzando hacia unas instituciones legítimas y eficaces". Por ello, favorecer la rendición de cuentas a la ciudadanía "debe constituir no sólo una exigencia normativa sino también un firme compromiso político de las personas y de los equipos que asumen tareas de gobierno de cualquier administración pública".
Bajo este prisma, ha defendido la transparencia y la rendición de cuentas son desde 2015 "ejes programáticos del Govern del Botànic" para "conseguir una democracia más participativa, efectiva y funcional, en la que exista responsabilidad política real por parte de las personas elegidas para gobernar".
Se trata de "un nuevo concepto de gobierno abierto que conversa permanentemente con la ciudadanía, promoviendo y facilitando la colaboración, una administración que favorece la innovación y que, mediante la planificación y la evaluación, garantiza una mejora continua de los servicios públicos y rinde cuentas de manera permanente".
En este contexto, el titular de Transparencia ha señalado que las universidades públicas deben situarse "a la vanguardia de las políticas de gobierno abierto, por su relevancia social y su condición de administraciones públicas, adaptándose al contexto social y político actual".
Ha llamado, en definitiva, a "institucionalizar un marco de integridad y de ética pública que favorezca la generación de vínculos de confianza entre la comunidad universitaria, la sociedad y la propia institución". "La rendición de cuentas ocupa un lugar destacado en este marco de actuación, como una forma de control al gobierno de la correspondiente institución y comprobación del cumplimiento de aquello que se ha propuesto", ha insistido.