El veto a España como destino turístico por casi todos los países europeos está agravando una situación que el Coronavirus ya había hecho muy complicada. El cierre completo de establecimientos durante el estado de alarma, y la reapertura progresiva y restrictiva que se ha producido de forma gradual, ha hecho del verano 2020 uno de los peores de la historia del turismo. Los últimos en sumarse a esta recomendación han sido Holanda, que desaconsejan viajar a Almería, Madrid, Baleares, Burgos, Salamanca y Navarra, mientras que Alemania se muestra más preventiva y elimina a todas las ciudades españolas de la lista de destino recomendable, salvo Canarias. Estas restricciones están siendo letales para un sector de la economía española que lleva sufriendo ya muchos golpes, curiosamente cuando alguno de los países que hacen estas recomendaciones superan los 1.500 contagiados por día, como es el caso de Alemania. Aun así, se han mostrado firmes ante su decisión. La Comunidad Valenciana, inevitablemente se está viendo fuertemente afectada por esta bajada de turistas, por lo que hemos querido hablar con Francesc Colomer, secretario autonómico de turismo para explique cuál es la situación del turismo en València en la actualidad.
"Las restricciones han afectado al turismo extranjero en la Comunidad Valenciana de una manera bastante severa, sobre todo teniendo en cuenta que en los últimos años habíamos consolidado una tendencia internacional enorme y necesaria para que se entiendan los números. Concretamente, en 2019 cerramos el año con 9'5 millones de turismo extranjero y este año hemos estado muy lejos de esa cifra" explica el secretario autonómico. "Es cierto que también tenemos otros mercados muy consolidados dentro del territorio nacional, pero el grueso al que estamos enfocados y que seguiremos haciéndolo es el internacional. Para dar salida a este año tan atípico hemos intentado potenciar el turismo nacional doméstico, pero no deja de ser un año en el que todos intentamos 'salvar los muebles'" compara Colomer para explicar la estrategia política que se está llevando a cabo.
Por otro lado, la incertidumbre de no saber qué pasará en el otoño no hace más que generar más ansiedad a los hoteleros. Los establecimientos de costa, sol y playa que han podido reabrir han logrado mantener su ocupación, con cifras que oscilan entre el 65% y el 70% de sus plazas disponibles, aunque no han funcionado tan bien otros destinos, como es el caso de las ciudades. En septiembre, sin vacaciones y sin turismo internacional, la situación preocupa, y mucho, al sector hostelero. "Este virus tiene dos realidades: la médica y el miedo. Para tranquilizar a los turistas se ha hecho un esfuerzo enorme por parte de todos los subsectores que engloba el sector económico (como la hostelería, el camping, el golf, las actividades rurales...) para hacer una estrategia sostenida que genere confianza y reduzca al máximo los contagios porque el 'free covid' no existe", recuerda.
Por lo tanto, el secretario autonómico de turismo ha querido transmitir un mensaje de tranquilidad y asegura que es más seguro venir a València a hacer turismo que por ejemplo, quedarse en el barrio de procedencia. "Los circuitos turísticos son más seguros que cualquier situación habitual como puede ser ir al supermercado o a un bar", asegura Colomer.
Otro de los factores que más incertidumbre y por lo tanto, más inestabilidad otorga a este sector son las recientes medidas anunciadas por el Ministerio de Sanidad que cierran el ocio nocturno de forma definitiva y que restringen palpablemente a la restauración. Estas medidas perjudican el futuro del turismo por el modo en el que se anunciaron, un viernes antes de que comenzara el fin de semana y como consecuencia, el momento más fuerte de la semana para este sector: "Nosotros vamos a acatar todas las medidas que se establezcan porque nuestro principal deseo es que se frene la expansión del coronavirus pero, lamentamos muchísimo que no se tenga en cuenta a nuestro sector a la hora de tomar decisiones", cuenta Antonio Carbonell, secretario general de la Federación Nacional de Empresarios de Ocios y Espectáculos.
En cuanto a las medidas anunciadas por el Gobierno que restringen al sector hostelero y prohíben el ocio nocturno, Colomer se ha mostrado comprensivo: "me gustaría que no se estigmatizase al ocio nocturno. Si las autoridades lo ven necesario lo cataremos pero lo que hay que hacer es trabajar para que el ocio, bien sea nocturno, diario, de espectáculos, etc. sea siempre seguro, porque generalizar... es muy duro", asegura Francesc Colomer. Por su parte,expresaba su deseo de que estas medidas fueran temporales.
Por todas estas cuestiones que se encuentran sobre la mesa del sector de la restauración, hostelero y ocio, se ve todavía más comprometido el sector del turismo. Según las declaraciones que el presidente de la Confederación de Empresarios Turísticos (CET-CV), Luis Martí, ha realizado recientemente a Europa Press, la segunda quincena del mes que ahora arranca se encuentra "absolutamente comprometida, con más incertidumbres que certezas", y más teniendo en cuenta que la mayoría de establecimientos ofrecen ahora facilidades para cancelar hasta el último momento.
Pocos datos son positivos, pero la realidad es que este verano se ha visto un aumento considerable de mercado nacional de gente joven y parejas con niños que hasta la fecha no había sido tan masivo. Si esto va a ir para largo tal y como prevén las autoridades, los esfuerzos de los hoteleros y empresarios que se dediquen al turismo tendrán que esforzarse por fidelizar a este tipo de público de cara al año que viene. En cuanto al ocio nocturno, desde el sector se tendrá que "trabajar por demostrar que el ocio nocturno también es seguro".