El tradicional desfile, que ha contado con la participación de buena parte del tejido asociativo y festivo de la ciudad, saca a la calle a más de 10.000 personas para recibir a Sus Majestades de Oriente
Melchor, Gaspar y Baltasar, acompañados por sus pajes y séquitos, han recorrido Mislata desde la avenida de la Paz hasta el mismo balcón del Ayuntamiento donde, acompañados por el alcalde, Carlos Fernández Bielsa, han dirigido unas palabras a las niñas y niños, los grandes protagonistas de la noche
La recepción a Sus Majestades de Oriente es ya el evento que mayor número de colectivos participantes y espectadores aglutina a lo largo del calendario festivo de Mislata. Como viene siendo habitual en los últimos años, más de diez mil personas, entre vecinos y visitantes de los pueblos de alrededor, han sido testigos de la entrada a la ciudad de Melchor, Gaspar y Baltasar, quienes han recorrido en sus espectaculares carrozas las principales calles y avenidas de la ciudad. Allá por donde pasaban eran recibidos con una gran ovación y miradas de ilusión por parte de los más pequeños.
La esperada visita comenzaba a primera hora de la tarde, cuando los Reyes Magos llegaban a la avenida de la Paz para hacer su primera parada y repartir regalos a los niños y niñas de este barrio. Custodiados por la Policía Local de Mislata y acompañados del alcalde, Carlos F. Bielsa, se desplazaban hasta la avenida del Sur desde donde comenzaban su recorrido por el corazón de Mislata. A partir de la calle Miguel Hernández, Sus Majestades dejaban sus carrozas para recorrer a pie los últimos metros hasta el Ayuntamiento. Un último tramo en el que se concentraba el mayor número de público para saludar de cerca a Melchor, Gaspar y Baltasar.
El momento más espectacular de la tarde se ha vivido con la entrada en la plaza de la Constitución, marcada por un espectáculo de luces y música. El alcalde Bielsa y el concejal de Fiestas, Toni Arenas, han recibido a los tres magos de Oriente y los han acompañado hasta el balcón de la Casa de la Vila para anunciar su tradicional mensaje de paz y alegría a toda la infancia de Mislata.
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