El 11 de octubre de 2023 María Estela y Marina descubrieron gracias a una llamada que su esfuerzo en las pruebas y entrevistas para ser fallera mayor de València habían dado sus frutos. Ese martes de octubre marcó el inicio del reinado de ambas: María Estela Arlandis, de 22 años, como Fallera Mayor de València 2024; y Marina García, de 11, en el cargo de Fallera Mayor Infantil 2024.
La pasión por la fiesta fallera les viene de cuna, ya que Marina está apuntada en su comisión — la Manuel de Falla - Tamarindos— desde que nació. María Estela también ha estado ligada al mundo fallero desde siempre por su familia, pero no fue hasta los siete años que entró a formar parte de la Falla Obispo Jaime Pérez - Luis Oliag.
Ahora, juntas están descubriendo en primera persona cómo es ser las máximas representantes de la fiesta, una experiencia que están viviendo al máximo junto con las otras 26 chicas y niñas que integran sus cortes de honor.
Nos remontamos al día en el que comenzó todo. ¿Cómo fue el momento en el que el teléfono sonó en vuestra comisión?
Marina: Yo me emocioné mucho en esos momentos, creo que todo el mundo lo hubiera hecho. Sentí mucha emoción y la verdad es que ya tenía ganas de conocer a mi fallera mayor. Cuando acabamos de gritar porque no nos lo acabábamos de creer dije "Mamá, tengo ganas de saber quién es mi fallera mayor".
María Estela: Yo recuerdo que pasé un día con muchos nervios; no parecía ni yo, la verdad, porque era como que lo teníamos todas tan cerquita, ¿no? Recuerdo estar en la falla muy muy nerviosa y la llamada de Marina la recuerdo como la más larga de la historia, quizá porque tenía ganas de que llegase la otra llamada.
Me alegré mucho por ella y luego pasó todo corriendo porque además íbamos con retraso, entonces me llegó la llamada mucho antes de que la alcaldesa dijera mi nombre. Simplemente recuerdo ver el móvil iluminarse y empezar a gritar y a celebrarlo con tu familia, con tus amigos. Fue un momento increíble.
¿Os lo esperábais?
M: No, que va. Para nada
M.E: Yo creo que ninguna de nosotras se lo esperaba. Al final, todas tenemos las mismas posibilidades.
¿Cómo fue el proceso hasta llegar a estar en ese grupo de 13 chicas y niñas entre las que está la fallera mayor? ¿Fue difícil para vosotras?
M: Yo lo pasé súper bien, nuestros jurados lo hicieron todo súper fácil, no te sentías para nada observada y parecías una más. Nos lo pasábamos siempre súper bien y yo creo que todas, saliera quién saliera, no pensábamos en ese momento en el final. Los últimos días sí que había más nervios; incluso de broma decíamos “os voy a tocar a todas porque a lo mejor tú eres la fallera mayor y das suerte”.
M. E: Para mí un poco, pero más que nada porque al final son muchos días y es una montaña de emociones. Un día estás muy contenta porque te lo has pasado súper bien; y otros días que sientes que se te tumba un poco porque tú tienes un objetivo muy claro y crees que no lo podrás cumplir. Es duro dependiendo de la seguridad que tiene cada una por todo lo que vives también.
Cuando llegan los últimos días, el final del proceso, necesitas que haya una respuesta ya que sea que sí o no. Pero, al final, te quedas con todo lo bonito: con las personas que conoces y el jurado que fue un encanto. Entonces, ahora todo lo que recuerdo es maravilloso.
¿Cuándo comenzásteis a sentir pasión por las Fallas?
M: Yo desde que nací he pertenecido siempre a la misma comisión y estoy agradecida de corazón de haber estado en esa comisión porque me lo pasé súper bien y tengo súper buenos recuerdos.
M.E: Yo empecé un poco más tarde cuando tenía 7 años, pero eso no significa que mi familia no fuese fallera; de hecho, mi familia siempre ha sido fallera de dos comisiones diferentes. Pero, por circunstancias de la vida al pertenecer a barrios diferentes mi familia no se podía decantar por uno hasta que decidí apuntarme a la comisión de la que era mi madre también.
Se os ve siempre muy compenetradas, ¿cómo es la relación que tenéis entre vosotras?
M: Yo con María Estela no coincidí ni hablé mucho durante las pruebas y las entrevistas antes de saber que éramos las falleras mayores. Y justo un día en una de las pruebas fue ella quien nos hizo una foto a todas y luego le pregunté si podía hacerme una foto con ella sin saber que luego seríamos las elegidas. Nos llevamos super bien y pasamos mucho tiempo juntas y, al final, es ella la que te entiende de verdad porque está pasando por lo mismo que tú.
M.E: Con la corte coincides mucho, pero con la que más coincides es con Marina. Al final, ella es la única que entiende lo que estás viviendo y es la que te acompaña en todos los actos; entonces, el nivel de conexión que tú tienes con la fallera mayor infantil es muy grande. La verdad es que nos llevamos fenomenal y nos complementamos a la perfección. Ella es un “terremotito” y siempre me lo paso bien con ella.
¿Y cómo es la relación entre vosotras y la Corte de Honor?
M: Es muy buena porque ellas también son un pilar fundamental del año y nos llevamos súper bien. En mi corte, somos puro terremoto.
M.E: En la mía somos chicas bastante jovencitas todas, hemos bajado bastante el rango de edad, pero eso no significa que seamos iguales. Somos un grupo bastante heterogéneo y creo que eso es lo divertido porque creamos momentos inolvidables y para mí mi corte lo es todo.
Todavía os quedan los días más especiales como falleras mayores, pero hasta ahora, ¿esperábais que fuera así la experiencia?
M: Yo no había tenido ninguna experiencia antes y tú te esperas que hay jaleo por todo lo que hacen las falleras mayores, pero no te lo imaginas hasta que lo vives. Hay mucho jaleo fallero y eso mola un montón y a mí me ha gustado mucho y me ha sorprendido para bien.
M.E.: Yo ya fui Fallera Mayor Infantil, entonces más o menos sabía lo que iba a vivir. Aún así, ha superado totalmente las expectativas. Yo me puse el objetivo de disfrutar y todos los actos los estoy disfrutando muchísimo y me estoy quedando con todo y eso es al final lo que nos va a quedar.
¿Y qué es lo que más os ha sorprendido hasta ahora?
M: Cómo se vuelca la gente con la figura de la Fallera Mayor de València, es como que la gente cuando pasas te admira, lo notas en los ojos, cómo te tratan. Existe mucho respeto a esta figura de la fallera mayor y eso es totalmente increíble. Yo me he sorprendido porque me han contado que hay gente que ha ido a mi indumentarista y les han pedido el gris de Marina García Arribas, entonces que te digan cosas como estas es porque estamos marcando historia.
¿Os ha cambiado la vida en cierto modo el ser fallera mayor de València? ¿Cómo compagináis vuestra vida diaria, estudios y trabajo con el cargo?
M: La vida te cambia, pero para bien. Yo ahora de repente falto mucho al cole, tengo muchos actos, pero me encanta. No me esperaba que esta experiencia fuera tan fuerte y me está gustando muchísimo. Yo soy muy buena estudiante y el colegio lo estoy compaginando muy bien porque tengo un profesor que me pone muchas facilidades y estoy muy agradecida a mi profesor Jaume. Él me dijo que sexto, en mi caso, iba a ser un repaso del curso anterior y que yo lo iba a tener todo controlado y que estuviera tranquila.
M.E: Prácticamente no tengo vida social entre comillas porque no tengo tiempo para salir a tomar algo con mis amigos; tampoco tengo tiempo para ir a ver a mi novio porque vive en Paraguay y no puedo ir ahora a verlo. Aún así, sabes que esto es algo temporal y es una suerte estar dónde estás. También es un sacrificio, pero cuando te presentas tú tienes que saber a qué te vas a enfrentar.
María Estela, tú estudias cuarto curso de Derecho.
M.E.: Sí, estudiaba. Dejé la carrera cuando me enteré que iba a ser fallera mayor. No me dolió nada porque pensé que había tenido la suerte de conseguir este cargo y quería disfrutarlo al máximo. Lo más seguro es que la retome el año que viene, aunque todavía no he tenido tiempo de pensarlo. Estoy viviendo demasiado el presente y todavía no he puesto la mirada en el futuro.
¿Teníais claro que os queríais presentar para ser Fallera Mayor de València?
M: Yo también, siempre ha sido mi sueño desde pequeña, entonces llegó junio y mi madre me preguntó si me quería presentar. Le dije que sí sin pensarlo mucho porque quería intentarlo aunque no fuera la elegida. Para mí ir a la Fontenta y entrar en la corte era top y llegar a ser la Fallera Mayor Infantil es lo máximo. Esto es un sueño, esto ya está en las nubes y no me lo creo aún.
M.E: Sí, yo creo que todas las chicas que se presentan en el proceso deben saber que es para ser Fallera Mayor; luego ya entran en juego las circunstancias de cada uno, pero yo lo tenía clarísimo cuando tomé la decisión.
¿ Y cuál es el acto que más ganas tenéis de vivir?
M: Pues tengo ganas de todo, pero un acto que me ha marcado ha sido la Exaltación. También tengo muchas ganas del mes de marzo en general porque es el mes que toda fallera espera durante todo el año.
M.E: Yo también tenía muchas ganas de vivir la Exaltación. Pero, ahora mismo tengo muchas ganas de la ‘plantà’, de ver la falla de las palomas en la plaza del Ayuntamiento y ver lo espectacular y grande que es. También me apetece ver la plaza llena de gente con las mascletaes.
A través de Instagram, compartís los actos y momentos que estáis viviendo como falleras mayores de València. ¿Cómo es el ‘feedback’ que recibís en vuestros perfiles?
M.E: Yo me he dedicado mucho tiempo a las redes sociales, entonces ya me pillan bastante de cerca y yo creo que conmigo se ha dado un pasito más, ¿no? Se ha hecho ese enlace de Fallera Mayor de Valencia con las redes sociales. Yo creo que todo se puede hacer dentro de unos límites porque es verdad que la figura de Fallera Mayor de Valencia tiene un protocolo y unas pautas a seguir. Pero, aún así, podemos acercarnos a la gente perfectamente y creo que el resultado que está quedando es increíble.
La gente está muy pendiente de lo que subes y crea una expectación muy grande. Es genial que gente de otros sitios también te pregunte por tu fiesta o que te digan “oye, qué guapa estás hoy", eso te sube muchísimo la moral.
Y, finalmente, ¿cómo os gustaría que os recordasen una vez acabe vuestro reinado como falleras mayores 2024?
M: A mí me gustaría que se acordasen de mí como Marina García Arribas, una fallera mayor infantil muy natural y espontanea como soy yo. Que todo el mundo se acuerde el año en el que Marina y María Estela fueron falleras mayores.
M.E: Yo querría que me recordaran como una fallera mayor del siglo XXI, actual, cercana y muy normal. Si me recuerdan así yo ya me siento satisfecha.