La consellera de Sanidad Universal y Salud Pública, Ana Barceló, ha avanzado el desarrollo de un plan estratégico de prevención y tratamiento de la obesidad, "un problema que en nuestra comunidad arroja cifras preocupantes y que no se solucionarán con medidas arbitrarias ni simplistas, sino con una verdadera estrategia integral y ambiciosa".
Así lo ha recordado durante la inauguración en València del I Foro CEV 'Comprometidos con la alimentación saludable', celebrado en la sede de la Confederación Empresarial Valenciana, en la que ha apostado por "seguir avanzando hacia un modelo de sanidad que tiene en la prevención y en la concienciación social dos de sus principales pilares".
Barceló, que ha estado acompañada del presidente de la CEV, Salvador Navarro, y el presidente de la Comisión Cadena Agroalimentaria de la institución, Rafael Juan, ha recordado que la Conselleria de Sanidad tiene en la promoción de la salud uno de sus ejes principales de trabajo.
Así, ha destacado que con el Pla Bé, por ejemplo, se ha promovido hábitos de vida, entre otros alimentarios, que redundan en un mayor bienestar tanto a corto como a largo plazo y asimiso se ha extendido la Red Xarxa Salut en colaboración con los municipios de la Comunitat Valenciana, para que las administraciones colaboremos en este objetivo común.
Barceló ha asegurado que "junto con la Conselleria de Educació, Investigació, Cultura i Esport, se ha establecido una guía para que los comedores escolares eduquen también en la salud a través de una alimentación saludable y contribuyan así al crecimiento equilibrado de nuestros niños y jóvenes".
La Comunitat Valenciana, ha subrayado la consellera, es una tierra "privilegiada", y así lo reconoció la Unesco hace ya casi una década, al incluir la dieta mediterránea como patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad.
CULTURA ALIMENTARIA
"No es solo el patrón alimentario con más evidencias científicas en cuanto a efectos beneficiosos para las personas, sino que supone también una manera de cocinar y consumir determinados alimentos, unas determinadas prácticas agrícolas, la cría de animales o la pesca, y una extraordinaria cultura alimentaria ligada a la socialización, al encuentro entre personas y al fortalecimiento de vínculos sociales", ha indicado.En esa línea, la titular de Sanidad ha destacado el hecho de que los ciudadanos estén cada vez más interesados en los productos que consumen en diferentes aspectos, desde su calidad gastronómica, su origen o su comercialización, hasta los efectos que tienen sobre su salud. Un creciente interés que se debe, principalmente, "a la conciencia que como sociedad hemos desarrollado sobre el modelo de alimentación, pero también sobre modelos económicos y, por supuesto, estilos de vida saludable".
A su juicio, también ha crecido exponencialmente el interés de la ciudadanía por el bienestar personal, en general, y la alimentación sana, en particular, lo que ha hecho surgir empresas y colectivos de agricultura ecológica y de proximidad y ha diversificado la industria de la nutrición.
A su vez, los ciudadanos y ciudadanas van optando por comercios de venta y promoción de productos saludables, e incluso toda la actividad derivada de la combinación entre alimentación e informática han experimentado un impulso extraordinario, según la consellera.
Durante el encuentro se ha puesto de manifiesto el compromiso de las empresas agroalimentarias valencianas a la hora de participar, junto con las autoridades, en la puesta en marcha de estrategias de nutrición y prevención de la obesidad como la anunciada por la consellera.
Así, desde la confederación se ha puesto el acento en la mejora de la composición de los alimentos y bebidas y en las alternativas al uso de aditivos, o en las reglas éticas para la difusión de mensajes publicitarios sobre alimentos y bebidas, sobre todo pensando en la población infantil.
"Convertirnos una sociedad más sana y consciente nos beneficia a todos, pero también nos corresponde a todos fomentar iniciativas que nos permitan conseguirlo", ha concluido la consellera.