El confinamiento ha marcado un antes y un después en las rutinas de la ciudadanía y los altibajos emocionales han ido de la mano. Sin embargo, el presentador de ‘Atrapa’m si pots’ de À Punt se ha encargado de poner el toque de humor a las semanas de encierre con el docu-reality ‘Diari de la quarantena’, que le ha valido el premio a la Mejor Iniciativa de Humor por la revista Time Out de Barcelona. Ahora, con la vuelta progresiva a la normalidad, el humorista Eugeni Alemany anima a aprovechar las nuevas tecnologías y la libertad de las redes para crear contenido e innovar en el mundo de la comunicación.
¿Cómo surge ‘Diari de la quarantena’?
Nació de forma espontánea con unas stories de Instagram, por eso todos los vídeos se han hecho en vertical. Enseguida empecé a recibir mensajes de la gente y gracias a ello se convirtió en un diario en el que ya el segundo vídeo tenía su título, por eso te digo que ha sido una cosa fresca y espontánea. Realmente ha sido la gente la que me ha animado a hacerlo, he recibido muchísimos mensajes diciéndome que estos vídeos eran los que animaban la cuarentena de familias e incluso de sanitarios y me quedo con muchos de ellos. Por ejemplo, un médico de Virginia (Estados Unidos) me contó que había vivido en los 90 en València y que entendía el valenciano y se reía mucho con mis vídeos. Y también gente de Latinoamérica que decía que aunque no entendían totalmente el valenciano como soy expresivo y es una lengua románica al final entendían lo que quería decir. Esto me ha demostrado que lo que importa es el contenido y no la lengua, porque quienes tengan interés en entenderla lo consiguen por ejemplo con este tipo de vídeos cortos.
¿Cómo recibes el premio a la Mejor Iniciativa de Humor de los Premios Time In?
Estoy muy contento. Es el primer premio que recibo en mi carrera como humorista y presentador y, además de eso, estoy orgulloso porque la revista Time Out es internacional, es una entidad privada y además este premio viene por los votos de la gente. Esto hace que sea un premio que no tiene discusión, como sí que puede pasar si fuese una entidad pública por ejemplo. La verdad es que me ha gustado mucho recibirlo. Lo que más me duele es que no se hayan hecho más cosas similares. Soy un señor de 44 años haciendo vídeos con mi móvil, palos de selfie y cosas que tenía por casa. ¿Dónde está la gente joven o unos Javis (Javier Ambrossi y Javier Calvo) haciendo esto? Hoy podemos hacer muchas cosas con el móvil y las redes sociales y veo que faltan ideas y ganas. Yo espero que muchos estudiantes o creadores audiovisuales se animen porque se pueden hacer muchas cosas con poco.
¿Crees que hace falta experimentar más con este tipo de narrativas?
Hoy en día no me atrevería ni a experimentar porque cualquiera lo tiene tan a su alcance… Hoy en día puede ser muy fácil producir este tipo de formatos y además de innovar con las nuevas tecnologías también me alegro de que he promocionado el valenciano, que es curioso porque como ya te he comentado he tenido mucho público que no era valencianoparlante y lo seguían. Se pueden hacer muchísimas cosas. Nos faltan creadores, publicistas, comunicadores con ideas y ganas. No hay que llorar. Como dicen, "quien no aporte, que aparte", y hay que aportar.
¿Qué balance haces de ‘Celebrity School’ y ‘Atrapa’m si pots’?
‘Celebrity School’ ha funcionado súper bien y es de los programas de los que más contento estoy. Teníamos un plató ad hoc, hemos hecho especiales, era un formato muy chulo con mucho show y mucho público y ojalá siguiese en À Punt. En cuanto a ‘Atrapa’m si pots’ también funciona súper bien y además hemos podido adaptarlo con un aire nocturno a los fines de semana, siendo muy eficientes no solo con los contenidos, sino con los recursos económicos, que es algo importante. Hasta las repeticiones que estamos emitiendo siguen teniendo público. Además, el público y los concursantes son geniales. Es una pena que estemos en 2020 y no en los 2000, porque eso hubiese sido un chute para la cadena y un éxito televisivo. Somos el programa de la parrilla de À Punt que genera contenido exclusivo para las redes y hay gente que a lo mejor no ve el programa cada día pero sí que lo sigue a través de las redes. Es otra forma de echar raíces y creo que hay que innovar.
¿Tienes en mente algún proyecto similar al ‘Diari de la quarantena’?
Sí, por supuesto. La libertad creativa y de expresión que se tiene a través de las redes sociales es increíble. Hago lo que me da la gana y como quiero como creador, como en este caso, en el que hemos hecho el diario entre mi mujer y yo. Es una sensación muy saludable y surgen cosas más atrevidas que a lo mejor no podrían emitirse en televisión. Es brutal. Me gusta haber podido promocionar el valenciano e incluso he tenido seguidores de Cataluña que me preguntaban que en qué cadena podían verme. También nos hemos dado cuenta de que mucha gente se ha sentido identificada con el personaje de mi mujer, de hecho el penúltimo era el único capítulo que teníamos claro que había que hacer. Yo creo que la clave es que ha sido un docu-reality muy real porque ha ido surgiendo de las actividades de nuestro día a día que eran las que podía tener cualquier persona.
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