Iolanda Batallé, escritora, filóloga y editora, se convirtió, en 2018, en la primera mujer en dirigir el Institut Ramon Llull, pero está convencida "que vendrán muchas más". "Tenemos la responsabilidad de enseñar a las niñas que, a la larga, ellas también podrán ocupar estos puestos. Tenemos la función de abrir camino porque la prioridad es llegar a puestos de responsabilidad y promover la diferencia", explica en una entrevista para Exterior.cat.
Así, desde hace más de dos años, Iolanda Batallé ha apostado por incorporar la transversalidad, la igualdad de género y la digitalización. Unos cambios que, con la llegada de la pandemia, se han acelerado. "Desde el Llull hemos tenido que reinventarnos en todas las disciplinas para ayudar a todos los sectores de la cultura. Estamos ante una situación desconocida que nos ha pedido soluciones creativas y adecuadas para cada disciplina".
No obstante, lo que ha supuesto una gran inspiración ha sido Xarxa Llull, que más allá de la enseñanza de la lengua y la literatura catalana, "el reto es dar continuidad a aquellos que quieren seguir en el aprendizaje del catalán". De esta manera, pese a las dificultades que ha supuesto la pandemia, la Xarxa Llull no solo ha continuado funcionando, sino que "impulsamos la posibilidad de hacer doctorados de catalanística en el extranjero".
Pero esta red sigue creciendo. "Uno de los grandes retos que tenemos fijados es disponer de una Xarxa Llull en todas las disciplinas: traductores, intérpretes, bailarines, músicos… Queremos llegar a todas partes. Por eso, hemos puesto en marcha iniciativas como ‘Catalan Culture’ o ‘Paper Llull’ para hacer que el catalán llegue al mundo, aprovechando la diversidad lingüística". En este sentido, destaca Batallé, "el mejor ejemplo de todo esto es el proyecto ‘Faber Llull’, que comenzó en Olot, después en Andorra y Palma y, ahora, queremos ampliarlo a València y París".
Autora: Noemí Elías
Aun así, no son los únicos objetivos. Y es que, en este 2021, el plan de actuación del Institut Ramon Llull "pone en el centro la cultura artística en catalán y con una clara vocación exterior, pero, además, incluye un vector determinante como es el ámbito digital, que estructura las actividades de forma transversal, aprovechando las fortalezas que las unen e incorporando vectores como la búsqueda, el conocimiento o las estancias en residencias".
Así, añade Batallé, "los retos responden a una voluntad del Llull de dotarnos de un programa coherente, ordenado y sostenible, adaptado a una serie de coyunturas nacionales e internacionales que hacen que necesitamos más que nunca proyecto y actuación programada. Todo ello con la voluntad de crear nuevos espacios de actuación, nuevas herramientas por el sector y estructuras que nos permitan transformar conceptos y hacer viables nuestra misión". Pero, además de este reto internacional, el Institut Ramon Llull se ha propuesto otro, de gran envergadura, para este 2021: que la Generalitat Valenciana entre en la gobernanza del Llull.
2022, el año del 20 aniversario del Institut Ramon Llull
Sin duda, una de las fechas señaladas que marcarán la celebración del 20 aniversario será la participación del Llull en la London Book Fair. "Será el momento de visualizar el momento dulce que vive la traducción catalana en el inglés. La London Book Fair 2022 será un punto de inflexión para la traducción en catalán en el mundo anglosajón, del mismo modo que lo fueron Frankfurt 2007, Bolonia 2017 o Buenos Aires 2019. Pero hay otros proyectos previstos para el 2022, como por ejemplo una gran exposición en el Pompidou de París, donde el año pasado arquitectos catalanes ya pudieron disfrutar de esta experiencia".Pero también, a nivel personal, Iolanda Batallé acaba de publicar su libro ‘Atraveix-te a fer les coses a la teva manera’ (Destino), que reivindica el papel de la mujer en los puestos de responsabilidad, pero a la vez traza el recorrido del Institut Ramon Llull, a las puertas del 20 aniversario. "Hace más de 20 años que dirijo equipos en varios ámbitos y, en este libro, intento compartir todo el aprendizaje y cómo lo hago yo. Es un libro que puede inspirar a otras personas e invita a todo el mundo a encontrar su manera".
En definitiva, concluye, "quiere ser un llamamiento a aquellos que ocupan lugares de responsabilidad para que reivindiquen su manera de ser".