Como representantes de los valencianos siempre debemos pedir más para la ciudad de Valencia, pero hay quehacerlo con sentido de la responsabilidad, siendo conscientes de la situación económica de la que venimos y de que integramos un gran país como es España, que necesita ahora más que nunca asentar las bases presupuestarias que están propiciando el crecimiento, la creación de empleo, garantizando las pensiones y aumentando el bienestar de los españoles.
Las inversiones del Estado en la Comunidad Valenciana subirán un 23% en los Presupuestos de 2018, un total de 792 millones. De esta cifra global, más de 227 millones están vinculados de alguna manera con Valencia, ya que se trata de actuaciones con repercusión en la ciudad como son infraestructuras de transportes e hidráulicas, inversiones en el puerto, en Cercanías, relacionadas con la mejora del medio ambiente,en el aeropuerto, la Marina etc.
La aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) supondrá un importante impulso a las políticas sociales con un incremento de las pensiones que beneficiará a más de 160.000 valencianos, por lo que considero injusto y un error político que el PSOE, Compromis, Podemos y los nacionalistas no apoyen el proyecto de Ley en el Congreso.
Los Gobiernos del Partido Popular y el presidente Mariano Rajoy han logrado recuperar la economía española después de que el PSOE nos dejara en la ruina y al borde de una intervención de la Unión Europea, con un crecimiento del PIB por encima el 3%, con la creación para este ejercicio 2018 de 475.000 nuevos empleos, y con un aumento del consumo y del bienestar social considerables que se están dejando notar en muchos hogares de España.
Los Presupuestos Generales son fundamentales para que la economía siga creciendo y el paro se reduzca al ritmo actual (en 2017 el número de desempleados bajo en 290.193 personas), y son también esenciales para avanzar en la ejecución de infraestructuras como el corredor Mediterráneo, el túnel pasante o la ampliación de la V-21
Las inversiones previstas cumplen con los compromisos asumidos por el Gobierno de Mariano Rajoy con Valencia y los valencianos. Entre ellas, el portavoz popular hay actuaciones previstas que son estratégicas para la ciudad de Valencia, como el estudio de Túnel Pasante y Canal de Acceso con una inversión de 1 millón de euros, el enlace del acceso del aeropuerto con la V-30 con 3 millones consignados, los 4 millones para la ampliación de la V-21, o los 2.338.000 € para el Corredor Mediterráneo y los137.747.000 € para la línea de Alta Velocidad.
Las inversiones del Estado en la Comunidad Valenciana subirán un 23% en los Presupuestos de 2018, un total de 792 millones. De esta cifra global, más de 227 millones están vinculados de alguna manera con Valencia, ya que se trata de actuaciones en infraestructuras de transportes, hidráulicas, en el puerto, Cercanías, AVE, Corredor Mediterráneo, relacionadas con la mejora del medio ambiente, el aeropuerto, la Marina etc.
Es lamentable la falta de responsabilidad del PSOE y Compromis al no acceder a negociar con el Gobierno los Presupuestos. El alcalde Joan Ribó, y su teniente de alcalde, Sandra Gómez, han utilizado el proyecto de Ley de PGE para lanzarse como fieras a criticar al Partido Popular, sin valorar la transcendencia que tiene para España que se aprueben estas cuentas, y sin haber llegado a plantearse, a través de los votos que disponen en las Cortes Generales, un posible acuerdo con el Gobierno como sí que han hecho otros partidos.
Sin embargo, llama la atención la vehemencia con que el alcalde y sus socios del tripartito critican los PGE frente a la aquiescencia que muestran con el recorte de las inversiones de la Generalitat para la ciudad de Valencia, que en el Presupuesto de 2018 han bajado más de un 4% respecto al año anterior. En cifras globales, el recorte es de más de 12 millones de euros.
Para ser creíble la actitud reivindicativa del alcalde frente al Gobierno central, debería mostrarla ante todas las administraciones, pero no es así, porque ha quedado patente, en la valoración que ha hecho de los Presupuestos, que Ribó antepone los intereses de su partido nacionalista al de los valencianos.