La cabeza de lista del PP al Congreso por Valencia, Belén Hoyo, ha asegurado este viernes que "el PSOE se ha convertido en un problema para la industria automovilística valenciana" y ha lamentado que fruto de sus "políticas erráticas haya empresas que son puntales en la economía valenciana como Ford que viven un peligroso periodo de incertidumbre laboral".
Así lo ha manifestado depsués de que este jueves se conociese que la planta de motores de Ford en Almussafes (Valencia) dejará de fabricar los motores Ecoboost de 2.0 y 2.3 litros en 2024, después de que la compañía haya decidido que la nueva generación de estos propulsores se produzca en Norteamérica a partir de 2022.
La parlamentaria ha subrayado las "muchas incógnitas sobre el alcance" que esta decisión puede tener sobre el empleo en la fábrica de Almussafes y en las empresas auxiliares que nutren de componentes a Ford, ha señalado en un comunicado.
Hoyo ha recalcado que las industrias del automóvil constituyen uno de los sectores industriales más importantes de España, ya que representan el 9 por ciento del PIB y dan empleo a más de 200.000 personas, "convirtiendo a España en el noveno fabricante a nivel mundial, aunque antes de gobernar el PSOE era el octavo".
"La inestabilidad que ha provocado el Gobierno de Pedro Sánchez con sus cambios de opinión sobre el uso del diésel ha espantado la producción de nuestras industrias, como el caso de Ford, que buscan lugares donde la fabricación de vehículos esté asegurada por la estabilidad político-económica y la certidumbre jurídica", ha indicado Hoyo.
CAÍDA DE VENTAS
La dirigente del PP ha remarcado que desde la llegada del presidente Pedro Sánchez al Gobierno "se acumulan los meses de caída en la venta de vehículos lo que además contribuye al envejecimiento de nuestro parque automovilístico hasta superar los 12 años de edad media".La número uno por Valencia a la Cámara Baja ha incidido en que el PP es "la única garantía de libertad, estabilidad y seguridad para un sector industrial que es puntal de nuestra economía" y ha citado el fomento del ahorro y la aplicación de medidas fiscales que "eviten la asfixia de las familias como objetivos irrenunciables para facilitar esa renovación del parque automovilístico".
"El PP no va a prohibir el diésel y frente a la improvisación de Sánchez ofrecemos certeza; vamos a reformar la tributación de vehículos reduciendo el peso de la fiscalidad en la compra facilitando la adquisición de vehículos más eficientes y a impulsar el Plan de Recarga Total para lograr el desarrollo efectivo de las infraestructuras de reposición de energía no contaminantes, especialmente en las ciudades", ha manifestado.
La candidata al Congreso ha asegurado que hay que "garantizar la transición hacia el uso de vehículos propulsados por otro tipo de energía de forma tranquila, garantizando la continuidad de los modelos vigentes y una implantación gradual de los nuevos", ya que "es la única forma de garantizar el empleo de calidad, estable y con salarios altos".
A su juicio, "la transición energética debe ser sin imposición" y realizarse "de forma gradual, sin imponer fechas límite como está haciendo el PSOE", ha criticado. Ha lamentado que "las trabas al sector automovilístico español ponen en peligro los más de 30.000 millones de euros que recauda el Estado en virtud de ingresos fiscales procedentes de este segmento clave de nuestra economía".
Belén Hoyo ha asegurado que el PP defenderá las industrias "por su valor estratégico en la creación de empleo de calidad, con salarios más altos y una mayor productividad respecto a otros sectores" en un contexto global que "no resulta nada favorable y que tampoco parece que vaya a mejorar en los próximos meses".
AMENAZAS A LA INDUSTRIA
La número uno al Congreso ha reflexionado sobre los peligros a los que se enfrenta la industria española en general y la valenciana en particular, que ve cómo "el mayor proteccionismo de potencias como Estados Unidos, la salida del Reino Unido de la Unión Europea y la desaceleración económica que acecha a España son factores que pueden dificultar seriamente la competitividad de nuestros fabricantes".El sector industrial, que "es un motor de la innovación y desarrollo tecnológico de nuestro país", "tiene que emplear esos avances de la tecnología a los procesos productivos, lo que ayudará a mejorar la competitividad y a reducir los costes", ha indicado.
Belén Hoyo ha destacado que el Partido Popular apostará por "eliminar los obstáculos que desincentivan el incremento de tamaño y fomentar las estrategias empresariales que permitan aumentar la dimensión media de la empresa industrial".
Por último, ha defendido que hay que "garantizar el equilibrio entre sostenibilidad medioambiental y competitividad de las empresas industriales radicadas en nuestras provincias" y "evitar la deslocalización de empresas hacia lugares donde la producción se realiza con estándares de seguridad y protección más bajos que los que tenemos en España".