La Campaña de la Renta y Patrimonio 2024, que se presenta en 2025, marcará la diferencia al comenzar el próximo 2 de abril, uno de los inicios más tempranos de los últimos años. La Agencia Tributaria ya ha publicado el calendario oficial, y la campaña se extenderá hasta el 30 de junio. Este adelanto sitúa la fecha de inicio como la más temprana desde 2019, año en el que comenzó el 1 de abril.
El objetivo de este cambio, según fuentes de la Agencia, es facilitar el proceso para los contribuyentes, dado el creciente volumen de declaraciones gestionadas cada año. Además, el adelanto busca optimizar los tiempos para aquellos contribuyentes que requieran de asistencia personalizada, ya sea vía telefónica o presencial.
Fechas clave
La presentación de las declaraciones de Renta y Patrimonio se podrá realizar a través de internet a partir del 2 de abril. Aquellos con declaraciones a ingresar mediante domiciliación bancaria tendrán como límite el 25 de junio. Por su parte, la asistencia telefónica para confeccionar la declaración estará disponible del 6 de mayo al 30 de junio, con citas previas que podrán solicitarse a partir del 29 de abril.
En cuanto a la atención presencial en las oficinas de la Agencia Tributaria, esta estará disponible desde el 2 de junio y se prolongará hasta el cierre de la campaña, el 30 de junio. Las citas podrán pedirse entre el 29 de mayo y el 27 de junio.
Novedades importantes para 2025
Entre las principales modificaciones, destaca la obligación de presentar la declaración para los parados que reciban prestaciones por desempleo, independientemente de si superan o no el límite de ingresos fijado en años anteriores. Hasta ahora, solo los asalariados y desempleados que percibieran más de 22.000 euros de un único pagador, o 15.000 euros de dos o más pagadores (si uno de ellos abonaba más de 1.500 euros), estaban obligados a declarar.
Este cambio busca mejorar el control sobre las prestaciones y asegurar que se integren correctamente en el sistema tributario. Asimismo, el límite de ingresos procedentes de un segundo pagador que obliga a declarar aumentará de 1.500 euros a 2.500 euros, flexibilizando las condiciones para los contribuyentes con múltiples pagadores. Y, al igual que en campañas anteriores, los trabajadores autónomos también estarán obligados a presentar la declaración, sin importar su volumen de ingresos. También lo estarán quienes reciban el Ingreso Mínimo Vital (IMV).
Con estos cambios, es fundamental que los contribuyentes revisen sus situaciones personales y laborales antes de la apertura de la campaña. La Agencia Tributaria recomienda utilizar su portal digital para obtener información personalizada, acceder a los borradores y realizar simulaciones previas.
Esta campaña, marcada por adelantos y ajustes normativos, refleja el esfuerzo de la administración por modernizar el proceso tributario, pero también supone un reto para los contribuyentes, que deberán prestar especial atención a las novedades para cumplir con sus obligaciones fiscales.