La sandía y el melón son las frutas por excelencia para poder aguantar el calor del verano. Pero este año, con una subida del precio que se ha duplicado respecto al año pasado, parece que no van a poder refrescar tanto como hacían antes.
En cualquier frutería o mercado valenciano la sandía se sitúa superando los dos euros el kilo, mientras que el melón puede llegar a alcanzar los tres euros el kilo. Una subida de precios que duplican los del año pasado para las mismas fechas.
¿A qué se debe esta subida? No es de extrañar que los precios de los alimentos y del coste de vida, en general, hayan aumentado. En cuanto a los melones y las sandías los propios vendedores explican que se han juntado varios factores que han producido esta subida de precios.
En primer lugar la falta de productos que pueda cubrir la alta demanda solicitada por los consumidores en verano, provocada por las malas condiciones climáticas de lluvia que impidieron la plantación tanto de sandía como de melón. “La última ola de calor de mayo también provocó que muchas de las matas de sandía y melón no pudiesen sobrevivir”, explica un propietario de una frutería del centro de València.
Todo esto se produce en un contexto de una subida generalizada de precios debido a varios factores como la guerra en Ucrania, el encarecimiento de las materias primas o de la energía.
Sin embargo, esta subida de precios no se está notando en el precio que se les paga a los agricultores por sus productos. En cambio, los precios que se pagan a los agricultores por las sandías y el melón han descendido hasta un 70%. Esto es debido a que el aumento de los precios como producto final ha hecho que la demanda de los mismos descienda bruscamente, por lo que existe una gran cantidad de sandías y melones que no se están llegando a vender.
El IPC más alto de los últimos 37 años
El INE hizo público el 29 de junio que el Índice de Precios de Consumo (IPC) de junio se prevé que alcance el 10,8% interanual, que supone su mayor nivel desde abril de 1985, cuando se registraron unos datos similares.
Este aumento desmesurado se debe principalmente al aumento de los precios de los carburantes y de los alimentos y bebidas no alcohólicas, grupo donde se encuentran las sandías y los melones.
Desde el Gobierno de España, se ha propuesto un paquete de medidas para disminuir el impacto de la subida de los precios en los bolsillos de los consumidores, pero que todavía no ha podido tener resultados. Entre las medidas se encuentra la extensión de los 20 céntimos de bonificación para la gasolina y del bono social para el consumo eléctrico, el cheque compensatorio de 200 euros a las familias con ingresos por debajo de los 14.000 euros o la bajada del IVA eléctrico del 10% al 5%.