En el primer año del llamado "Gobierno del Cambio", la Comunitat Valenciana ha sido testigo de un impulso significativo en su actividad económica, gracias a la puesta en marcha de cinco macroproyectos que han supuesto una inversión total de 9.000 millones de euros y la creación de 7.000 puestos de trabajo. Estos proyectos no solo demuestran la capacidad de la región para atraer inversiones, sino que confirman que las grandes inversiones no son un evento aislado, sino una tendencia sostenida bajo el liderazgo del jefe del Consell, Carlos Mazón.
Uno de los factores clave para atraer esta ola de inversiones ha sido la mejora de la calificación crediticia de la Comunitat Valenciana por parte de las agencias Standard & Poor's y Moody’s, una mejora que ha permitido una mayor capacidad de atracción de inversiones, tanto nacionales como internacionales. Además, ha venido acompañada de la implementación del Plan Simplifica, una reforma cuyo objetivo es facilitar la actividad económica mediante la simplificación de los trámites administrativos, reforzando el entorno regulatorio de la Comunitat Valenciana.
Inversiones en sectores estratégicos
Entre las inversiones más destacadas que se han anunciado recientemente, resalta el contrato de Stadler para fabricar más de 500 tranvías en su planta de Albuixech. Este acuerdo, valorado en 4.000 millones de euros, no solo impulsará el sector del transporte, sino que también creará cientos de empleos directos e indirectos.
Asimismo, el acuerdo con BP para la creación de un hub de hidrógeno verde en el Polígono del Serrallo, en Castelló de la Plana, marca un paso decisivo hacia la transición energética. Con una inversión de 2.000 millones de euros, este proyecto posiciona a la Comunitat Valenciana como un referente en el desarrollo de energías renovables y sostenibles.
Otro proyecto de gran envergadura es el de la empresa estadounidense Edwards Lifesciences, que construirá un centro de fabricación de válvulas cardíacas artificiales en Moncada. Con una inversión de 317 millones de euros, este centro generará más de 1.600 empleos directos y se enfocará en un sector de alto valor añadido como la biomedicina, lo que reforzará el tejido industrial de la región.
Por su parte, la gigafactoría de baterías de PowerCo en Sagunto, con una inversión de 3.000 millones de euros, se ha convertido en uno de los principales motores económicos de la comarca del Camp de Morvedre. Este proyecto, iniciado en la pasada legislatura, no solo generará 3.000 empleos directos, sino que también se estima que creará más de 20.000 empleos indirectos, atrayendo a otras empresas del sector y consolidando a la región como un polo industrial de relevancia en Europa.
Oficina Valenciana de Inversión
Para gestionar y fomentar la llegada de nuevas inversiones, el Consell ha anunciado la próxima creación de la Oficina Valenciana de Inversión (OVI), cuyo objetivo principal será agilizar y simplificar los trámites administrativos para las empresas que deseen implantarse en la Comunitat Valenciana. La OVI contará con dos áreas de actuación: una dedicada a inversiones ordinarias y otra destinada a inversiones estratégicas. En esta última, cada proyecto contará con un jefe exclusivo que se encargará de su gestión y seguimiento, asegurando que los procesos sean considerados urgentes y prioritarios por parte de la Generalitat.
El Decreto que regula esta oficina está en su fase final de desarrollo y contará con herramientas que facilitarán la llegada y desarrollo de proyectos estratégicos en la región. Además, el propio president de la Generalitat, Carlos Mazón, ha asegurado que se involucrará "personalmente" en lo que ha denominado un "consorcio ejecutivo", en el que José Díez, director general de Proyectos Estratégicos, tendrá un papel clave para garantizar el éxito de estos proyectos.
Impacto de las políticas empresariales en la producción industrial
El efecto positivo de las políticas empresariales del Gobierno valenciano ya se refleja en los datos económicos más recientes. El índice de producción industrial de la Comunitat Valenciana creció un 3,5 % en julio, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). La consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Nuria Montes, ha valorado este incremento como una señal de que la región está superando los efectos de las políticas anteriores, que no priorizaron la industria. “Desde julio, ya salimos de cifras negativas en las que estábamos como consecuencia de una política heredada del Gobierno anterior”, ha afirmado Montes.
Además, la consellera ha subrayado que las políticas actuales del Consell están impulsando la creación de empresas. De hecho, el pasado mes de junio, la Comunitat Valenciana registró el segundo mejor dato de creación de empresas de los últimos veinte años, lo que evidencia el cambio de tendencia económica en la región.
Sectores económicos en crecimiento
El crecimiento de la producción industrial no ha sido homogéneo en todos los sectores. Según el INE, los bienes de consumo experimentaron un incremento del 5 % en julio, mientras que los bienes de equipo sufrieron una disminución del 6,9 %. Por otro lado, los bienes intermedios registraron un aumento del 8,8 %, mientras que los bienes relacionados con la energía bajaron ligeramente un 0,1 %.
A pesar de estos contrastes, Montes ha enfatizado que las políticas empresariales del Gobierno actual están generando un entorno más favorable para la implantación de empresas industriales: “La Generalitat tiene que ser siempre un apoyo constante, no un obstáculo”. Según la consellera, este enfoque más favorable hacia la industria es uno de los factores que está atrayendo cada vez a más empresas a la Comunitat Valenciana.
Con la puesta en marcha de proyectos estratégicos y la creación de la Oficina Valenciana de Inversión, el Consell ha sentado las bases para que la Comunitat Valenciana continúe consolidándose como un destino atractivo para las grandes empresas.