Los fondos Nexte Generation son un instrumento de estímulo financiado por la Unión Europea para paliar los efectos de la crisis social y económica provocada por la pandemia. Estos fondos se ejecutarán a través de convocatorias de subvenciones y licitaciones de contratos, que publicarán y gestionarán los diferentes niveles de administración pública, dependiendo de sus competencias.
La Comunidad Valenciana ha sido una de las regiones más activas y comprometidas con el aprovechamiento de estos fondos, que suponen una oportunidad única para impulsar cambios estructurales que permitan modernizar el tejido productivo y el sector público valencianos. Para ello, la Generalitat Valenciana ha creado GVANEXT, una plataforma de información y apoyo para acercar las nuevas oportunidades de inversión y desarrollo de actuaciones a todos los agentes socioeconómicos de la región.
Los fondos Nexte Generation en la Comunidad Valenciana se articulan en torno a cuatro ejes principales: la transición ecológica, la transformación digital, la cohesión social y territorial y la igualdad de género. Dentro de estos ejes, la Comunidad Valenciana ha identificado una serie de ámbitos prioritarios para el uso de los fondos, que explicamos a continuación.
Innovación
Todo lo relacionado con la industria, el comercio y el turismo, con el objetivo de mejorar la competitividad, la diversificación y la sostenibilidad de estos sectores, que son claves para la economía valenciana, enfocándose principalmente en la transformación digital y en la adopción de las nuevas tecnologías.
Como pieza clave de la modernización, estos fondos pretenden transformar a la Comunidad, con proyectos que puedan promover la incorporación de, por ejemplo, la Inteligencia Artificial, para crear un impulso en la competitividad y en la eficiencia.
Para esto, hay que reconocer que la innovación es parte fundamental de cualquier progreso, por lo que se busca canalizar recursos hacia la investigación y el desarrollo, fomentando la creación de empleos, lo que conlleva a que el talento quiera quedarse en Valencia.
Pero la innovación no termina ahí, sino que se expande a dos espacios claves que tienen que ver con la creación de nuevas empresas y la sostenibilidad ambiental, donde los Fondos están sumamente enfocados.
Los proyectos que se desarrollen en torno a la reducción de la huella de carbono, así como los que intervengan en la implementación de energías más limpias son fundamentales en todo el entresijo del levantamiento económico que pretende la Comunidad.
Varias empresas se han enfocado en reducir sus costos y en ser más eficientes dentro de la filosofía del cuidado del medio ambiente, por lo que están aprovechando de buena manera la disposición de apoyar la modernización de infraestructuras y las prácticas sostenibles.
Una de ellas es Novaluz, que ha decidido acompañar muy de cerca todas estas propuestas, al mismo tiempo que sigue invirtiendo en desarrollar y aplicar las nuevas tecnologías que permitan reducir y eliminar la huella de carbono en Valencia. Una manera de hacerlo, es el apoyo directo a quienes están creando nuevas empresas, con soluciones que les permitan controlar sus gastos en energía desde el mismo momento en que el proyecto comience a realizarse.
Otros sectores que están en la mira de los fondos son la educación, la formación, la sanidad, los servicios sociales, la igualdad y la vivienda, todos enfocados siempre en la preservación del medio ambiente y el agua, con visión para nuevas estructuras que no afecten el territorio.
La Comunidad Valenciana ha invertido ya 1.623 millones de euros de los fondos Nexte Generation. Estas inversiones han beneficiado a más de 6.000 empresas y 300 ayuntamientos, que han podido desarrollar proyectos innovadores y sostenibles.
Los fondos Nexte Generation representan una oportunidad histórica que se pueden aprovechar para impulsar la recuperación, transformación y resiliencia, así como para reforzar la posición de Valencia como una región líder, dinámica y solidaria en el contexto europeo.