Los efectos negativos en la economía no se han hecho de esperar tras el paso de la DANA que asoló la Comunitat Valenciana el pasado 29 de octubre. Si bien todos los sectores se han visto perjudicados, en una autonomía donde los servicios tienen tanto peso -pues crean el 70% de los puestos de trabajo actuales-, el ámbito del turismo es uno de los que mayores pérdidas ha sufrido.
Teniendo en cuenta que el área turística supone el 16% del PIB valenciano, y que la Comunitat es el tercer destino español elegido por turistas extranjeros, no es de extrañar que los desperfectos ocasionados por las inundaciones hayan causado estragos en las pernoctaciones del mes de noviembre. Y es que, tal y como indica Luis Martí, vicepresidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de Castellón (ASHOTUR), el miedo es el mayor enemigo del turismo.
Esto quiere decir que, después de ver las imágenes de la catástrofe a través de los medios de comunicación y las redes sociales, mucha gente anuló sus desplazamientos a la Comunitat debido a la sensación de peligro y desolación que reinaba en la autonomía, todo ello sumado a la imposibilidad de acceder a la zona por la cantidad de vías cortadas y redes de transporte dañadas.
De este modo, solo en la provincia de Castellón, la DANA provocó entre un 70% y un 80% de cancelaciones de las reservas turísticas realizadas para el puente de Todos los Santos, una fecha que suele suponer una fuente de ingresos notables para alojamientos y restauración. En adición, la Asociación de Viviendas de Alquiler para Estancias Cortas (AVAEA) ha reportado un 45% de suspensiones de plazas en apartamentos turísticos en este mes de noviembre.
Aunque el sector ha visto gravemente afectada su actividad, cabe destacar que los hoteles y hostales -sobre todo aquellos que se encuentran en la propia ciudad de València- son los alojamientos que, dentro de estas circunstancias, han salido mejor parados. Esto es debido a que, en los días posteriores a la riada, la llegada de efectivos de emergencia y voluntarios de otras comunidades del país compensó ligeramente el bajón de turistas. Así lo ha expresado la Asociación Empresarial Hostelera y Turística de la Comunitat Valenciana (HOSBEC), aunque lamentan que la ocupación se ha reducido al 40% cuando, normalmente, en estas fechas, se encuentra cerca del 90%.
Uno de los más perjudicados por el temporal ha sido el turismo senior, ya que más de 400 personas se han visto afectadas por la cancelación de 8 autobuses del IMSERSO que salían desde la ciudad de València. Asimismo, también se han visto dañadas entre 35 y 40 agencias de viaje físicas situadas en la ‘zona cero’. Ante esto, la Confederación Española de Agencias de Viaje (CEAV) ha creado un fondo de recuperación destinado al apoyo económico de los negocios turísticos de este tipo damnificados.
Por otra parte, el presidente de la Federación de Hostelería en la provincia de València (FEHV), Manuel Espinar, ha estimado que la caída de la facturación en este sector se sitúa en torno al 75%. Además, ha expresado que la imagen de València se ha dañado debido a la catástrofe, dejando ver a la ciudad y su área metropolitana como un lugar caótico. Ante esto, el gobierno autonómico está preparando una campaña promocional de transición centrada en la recuperación, la solidaridad, el agradecimiento y la presentación de la capital como un enclave resiliente.
Impactos de la DANA en el sector turístico
La incidencia del temporal en el turismo valenciano puede resumirse en tres puntos importantes. En primer lugar, la cancelación de reservas y los retrasos. Los turistas, ante alertas de condiciones climáticas adversas, tienden a cancelar o posponer sus viajes. Además, las emergencias meteorológicas provocan, a menudo, que los aeropuertos y las estaciones experimenten retrasos o suspensiones en sus servicios.
Por otro lado, están los daños a las infraestructuras. Además de la dificultad de acceso a los destinos turísticos por los cortes en carreteras y los desperfectos en puentes y redes de transporte, las pérdidas de inventario y los deterioros estructurales afectan a la llegada de turistas y a la imagen de València como destino seguro y confiable.
En última instancia, el impacto a las atracciones turísticas también influye. El hecho de que las playas, los parques naturales y los enclaves al aire libre sean vulnerables a los fenómenos climáticos, sumado a la acumulación de escombros, rebaja el atractivo del paisaje valenciano.
Medidas para la recuperación del turismo en la Comunitat
Como estrategia útil para mitigar las pérdidas en el área turística y paliar las consecuencias de la DANA, es importante que las instituciones realicen una inversión para garantizar una infraestructura más resiliente, por ejemplo a través de la construcción de sistemas de drenaje más eficientes y barreras protectoras en zonas costeras.
También, es recomendable que se aprueben planes específicos de emergencia y protocolos de seguridad para el sector turístico. En ellos se deben incluir la capacitación para el personal, el establecimiento de zonas seguras para visitantes y la creación de sistemas de alerta temprana para reducir los riesgos.
Por último, resulta interesante, no solo para solventar los efectos del temporal, sino de forma generalizada, desarrollar una oferta alternativa. Esto pasa por promocionar la temporada baja y promover actividad en espacios cerrados para así mantener el interés turístico en condiciones climáticas adversas.
Como medida de recuperación del turismo de la Comunitat Valenciana, la Fundación Visit València ha lanzado una campaña bajo el lema “Verte en València nos alegra el corazón”, cuyo objetivo es demostrar que la capital sigue siendo un destino perfecto para pasar unas vacaciones. Asimismo, a partir de diciembre, la entidad seguirá seis líneas diferentes de actuación.
La primera es el impulso de campañas de promoción turística, hasta ahora paralizadas por respeto a las víctimas de la DANA. Seguidamente, el fomento de eventos en la ciudad, como Cuina Oberta, el certamen de entrega de los premios Gran Guide o la campaña de Navidad, este año enfocada en la solidaridad. En tercer lugar, está la asistencia a ferias nacionales e internacionales como las Jornadas Turespaña en el Sudeste Asiático.
También, se pretenden realizar numerosas celebraciones de workshops y viajes e impulsar la participación en actividades de indemnización turística en los destinos afectados. Por último, pero no menos importante, mejorar la comunicación con los medios y utilizando las redes sociales, para aumentar la visibilidad de las zonas turísticas de la Comunitat.