Los agricultores valencianos respiran aliviados con el cambio de postura de Bruselas. Y no es para menos. La Comisión Europea aprobó ayer que la importación de cítricos de terceros países deberá pasar el tratamiento en frío, un control sanitario que lleva pidiendo meses la Generalitat y el Gobierno de España.
La Conselleria de Agricultura aplaude el acuerdo de la Comisión Europea para aplicar el tratamiento en frío para las naranjas importadas de terceros países con presencia de la falsa polilla. Así, la responsable de este departamento, Mireia Mollà, señala que el cambio de criterio responde a la "presión coordinada entre el Ministerio de Agricultura, la Generalitat y el conjunto del sector en defensa de la citricultura y la sanidad vegetal europea".
Desde la Generalitat, el president Ximo Puig lleva meses tratando este asunto para ponerlo encima de la mesa y defender los intereses de los valencianos en Europa. Así, el pasado lunes mantuvo conversaciones con los embajadores de Alemania y Holanda en España para tratar de facilitar que la Comisión Europea aprobara la aplicación de un tratamiento de frío a los cítricos importados de Sudáfrica y otros países con el objetivo de evitar plagas. Las reuniones también fueron intensas con el ministro de Agricultura, Luis Planas. "Conseguimos que se nos atendiera y que vieran nuestras demandas absolutamente rigurosas", expresa Puig en referencia al ministro.
La iniciativa, que nació a petición del Comité Permanente de Plantas, Animales, Alimentos y Piensos, ha derivado en una de nueva que obligará al tratamiento en frío de los cítricos importados, una fórmula que impide plagas como la falsa polilla en las frutas. Durante la votación, la propuesta ha recibido el apoyo de una mayoría cualificada de estados miembros de la Unión Europea. La medida se aprobará formalmente durante una reunión de todos los comisarios europeos y entrará en vigor el 20 de junio, antes del inicio de las campañas de importación procedentes de países terceros.
Desde la Unió de Llauradors valoran de forma positiva que finalmente se haya tomado esta medida. “No es el tratamiento de frío más estandarizado internacionalmente, pero es sin duda un primer paso importante. Ahora hay que trabajar también para conseguir, aparte de a la naranja, el tratamiento de frío a las mandarinas y pomelos ante la amenaza de la Thaumatotibia”, asegura Carles Peris, secretario general de La Unió, quien indica que “es evidente que las interceptaciones con plagas son mayores en naranjas que en mandarinas, pero que en estas también se detectan y hay que unificar los protocolos a nivel mundial porque las plagas pueden entrar a través de volúmenes bajos de importaciones, por lo que hay que evitar un riesgo innecesario de transmisión de plagas entre países”, concluye.
"Un paso trascendental para el sector citrícola"
La consellera de Agricultura, en sus valoraciones tras conocerse esta noticia, destaca que "se ha conseguido que la UE dé un paso trascendental para el sector citrícola y la seguridad alimentaria y la sanidad vegetal del continente". "La Comisión Europea recupera la razón y el criterio técnico frente a una decisión que atentaba contra los derechos y la seguridad alimentaria de todo el continente", añade.
En este sentido, el tratamiento en frío no solo salva a la citricultura europea de la falsa polilla, sino también a otros productos sensibles, como el caqui, el albaricoque, el tomate, el pimiento, la berenjena, la uva, el plátano, el maíz, el roble, el melocotón y el garrofón.
La consellera reivindica así la puesta en marcha del tratamiento en frío de las naranjas importadas para la campaña comercial de este mismo año, además de avanzar que continuará con las reclamaciones para que el 'cold treatment' se extienda también a mandarinas y pomelos.
La Unió de Llauradors comparte también esta idea. “Suficientes motivos por tanto para pedir incluir las mandarinas, porque existe un peligro latente que entren esas plagas en nuestra citricultura también a través de ellas. Nadie puede prever que una plaga nos pueda entrar por naranjas o por mandarinas, así que el riesgo existe sea la especie que sea”, cuenta Carles Peris.
Esta es la primera vez que la Unión Europea aprueba una medida similar para aplicar el tratamiento en frío a la importación de frutas de países terceros.