Los 266 ayuntamientos de la provincia de Valencia, así como las mancomunidades, dispondrán de más tiempo para ejecutar las obras del Plan de Servicios y Obras Municipales (SOM) 2018-2019, a través del cual la Diputació ha invertido 72 millones de euros en las comarcas valencianas. El último pleno de la legislatura, celebrado este jueves para resolver cuestiones pendientes antes de la constitución de la nueva corporación, aprobó la ampliación del plazo de ejecución de estas obras hasta el 30 de abril de 2020.
De esta manera, los ayuntamientos tendrán más margen para terminar las obras de un plan bianual en el que se han podido acometer proyectos de envergadura relacionados con mejoras urbanísticas, infraestructuras, patrimonio, equipamiento público y demás necesidades de los municipios. El SOM es el programa más importante de la corporación provincial y llega tanto a los pequeños municipios como a los de tamaño medio y las grandes ciudades. En un principio, estas actuaciones debían estar terminadas antes del 31 de agosto de este año, con posibilidad de prórroga hasta el 29 de noviembre.
En la asignación de estas ayudas se atienden indicadores sociales, demográficos, económicos y medioambientales, evitando así cualquier tipo de discrecionalidad. En el reparto se ha tenido en consideración el censo, la superficie del término municipal, la tasa de desempleo registrada, los costes efectivos, los núcleos históricos o la adhesión al Pacto de las Alcaldías por el Clima y la Energía, entre otros aspectos.
Además de las cantidades que han recibido los municipios de hasta 50.000 habitantes para mejorar sus instalaciones y servicios, las cuatro grandes urbes de la provincia, Gandia, Torrent, Sagunto y Paterna, se han repartido otros 4 millones de euros, mientras que València ha destinado la partida recibida por la Diputació para mejorar la calidad de vida en sus pedanías. Las mancomunidades se han beneficiado de otros dos millones de euros de inversión provincial.
Con esta ampliación del plazo de ejecución, los municipios se garantizan poder terminar las obras y no tener que renunciar a la ayuda que reciben de la Diputació, que con esta medida trata de facilitar la gestión de los consistorios a la hora de llevar a cabo estas mejoras en sus pueblos, como ya hizo adelantando parte de esas ayudas para facilitar la planificación y puesta en marcha de las actuaciones.