Se trata de Manolo Gabbiadini. El delantero de 1.86 mt y 26 años podría ser el reemplazante natural de Paco Alcácer después del agujero profundo que dejó en una delantera que marca, sí, pero que no convence.
El mercado de invierno puede traer sorpresas. Ya que el Valencia goza ahora de un técnico italiano de trayectoria y con influencias en el país mediterráneo, empiezan a correr los rumores de que el fichaje de Gabbiadini estaría avalado por él mismo, quien al parecer quiere partir a tierras valencianas.
El plantel blanquinegro está golpeado psicológicamente, como lo admitió el mismo técnico después del partido ante el Granada. No hay líderes y tampoco hay gol, una realidad que un delantero como el lombardo podría cambiar.
De las 13 jornadas que se han vivido en la Serie A hasta ahora, Gabbiadini ha jugado 338 minutos y ha marcado un gol. También ha marcado una sola vez por la Champions, donde ha jugado 96 minutos. Ha sido seleccionado en la selección Sub18, Sub21 (donde marcó en 12 oportunidades) y en la absoluta italiana, con debut en 2012.
Si bien su figura en el Nápoles ha estado eclipsada por Milik, el delantero conoce la Liga italiana, lo que podría ser una ventaja al considerar la exigencia que esta competición pone sobre los atacantes; ha jugado en el Atalanta, Citadella, Bologna, Juventus y en la Sampdoria. El precio del jugador siempre ha estado en alza y en el mercado de verano llegó a los 17 millones de euros.
El entorno del club entiende que vender a Gabbiadini a un rival directo del Calcio puede ser un despropósito. Por eso, cederlo a algún equipo extranjero, como el Valencia (o el West Ham inglés), es una de las opciones que han considerado tras las vueltas de Suso para rastrear las posibilidades.
Además de Lapadula y Hernanes, el colombiano Luis Muriel, del Génova, es otro de los que alimentan esta época de rumores antes del mercado de invierno. Junto al Valencia, precisamente el Nápoles y el Chelsea son dos que lo siguen de cerca.