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Al Levante no hay quien lo pare. Ayer ganó nuevamente en el Ciutat de Valencia y se encumbró en el primer puesto de la clasificación con 19 puntos, ahora en solitario después de que Lugo los alcanzara el sábado.
A pesar de que empezaron abajo en el marcador con un gol en propia puerta de Iván López a los 4’, pareciera que los granotas conocen sus argumentos y la obligación de terminar sus partidos con un triunfo. Pasó media hora desde ese error y Roger, el de siempre, tomó con la izquierda un centro de Abraham y consiguió el empate.
Los de Valladolid llegaron a Valencia a responder a las expectativas de Muñiz, quien sabía que se enfrentaba con uno de los buenos equipos del fútbol español. Más allá de que el marcador se abrió por ese infortunio en el que Postigo y López protagonizaron una película digna del cine del absurdo, los pucelanos empezaron el partido con más fuerza.
Después del empate de Roger, los visitantes continuaron con el dominio pero carecieron de peligro. Así, se acabó la primera parte de este duelo que, al volver tras el descanso, trajo lo mejor de sí. Morales tomó su posición con maestría y hubo un intento de Roger, salvado por la defensa del Valladolid.
Muñiz maneja al Levante con perfección y siempre necesita más; era claro, no podía escaparse el partido en el Ciutat. Así, a los 60’, tras un saque de banda de López, la tomó Jason de primera y consiguió el 2-1.
Faltaban solo 15 minutos y Jorge Figueroa Vázquez apuntó el punto penal. Fue Roger el encargado de generar el 3-1 con un tiro que batió al portero Becerra. El Levante, que había empezado perdiendo, remontó y con mucha gracia. Pero la cosa no acababa ahí. A cuatro minutos del final Balbi empezó un ataque para Valladolid que tuvo como destino las piernas de Ibán Salvador, el responsable del 3-2 definitivo del partido.
La expulsión de Lerma a los 91’ quedaría como una anécdota ensombrecida por el nuevo triunfo de los de Orriols en su estadio, ante 12 298 seguidores. Con esto, Muñiz y los suyos se preparan para el partido contra el Almería del próximo fin de semana y, cómo no, siguen escalando y coqueteando con el ascenso.