Si hay algo que conecta con las raíces de los valencianos y las valencianas es l'Albufera, la laguna que ha configurado su identidad a lo largo de los siglos y que también ha sido un importante motor económico, especialmente para sus pueblos vecinos. Hoy, sus aguas y parque natural reivindican protección para no perder este espacio que es un ecosistema y escenario de tradiciones únicas, entre ellas la Vela Latina, que cada jornada de exhibición acoge a centenares de curiosos y curiosas para hacer un viaje en el tiempo.
La Vela Latina es un testigo único de la historia no solo de Valencia, sino también de las diferentes civilizaciones mediterráneas. Tiene origen en la Época Griega y su representación más antigua conservada es del siglo II aC, pero la fuerza del imperio fue capaz de extenderla a lo largo de los siglos por todo el Mediterráneo, y fue en la Época Romana cuando se introdujo en la Albufera, de acuerdo con la Federación Deportiva Municipal de Valencia.
Durante los siglos de dominio islámico, desde el año 714 hasta el 1238, el pueblo musulmán fue clave para consolidar su uso, sobre todo a partir del siglo VII, haciendo de esta un elemento cotidiano para las familias del litoral valenciano, especialmente en los municipios limítrofes a la laguna como El Palmar, Catarroja, Sollana, Silla, El Perellonet o Alfafar. Jugaba un papel muy importante para las actividades que se desarrollaban a la Albufera, como la pesca, la caza, el cultivo del arroz en esta amplia zona de arrozales, el transporte o, incluso, el contrabando.
Pero, ¿qué es la Vela Latina? Aunque muchas y muchos piensan que hace referencia a un tipo de barco, es un tipo de vela, concretamente una vela de forma triangular que se dispone en una antena que cruza oblicuamente el mástil, normalmente situado en la proa, y que recorre de forma longitudinal el casco.
Si hablamos del caso concreto de l'Albufera, el tipo de barco es el "barquet albuferenc", con un fondo plano y una longitud de 5 metros que permiten navegar por espacios estrechos como canales y pasillos de vegetación típicos de esta laguna, que tiene aguas que no son profundas.
Esplendor, olvido… y recuperación
El uso de la Vela Latina fue indispensable para la economía de muchísimas familias a lo largo de varios siglos, y en la Edad Media se vivió su mayor esplendor, según la Federación Valenciana de Vela Latina. Sin embargo, con la llegada de la máquina de vapor y la construcción otros barcos que realizaban tareas más concretas en l'Albufera con formas de propulsión por motor, desaparecieron progresivamente. Se puede decir que en el siglo XX, y sobre todo a partir de la década de los 60, dejan de utilizarse.
El aprecio por esta tradición provocó que a partir de los años 80 las comunidades de pescadores de los municipios albuferenses tomasen voz para reivindicar su protección y poner en valor la importancia que tuvieron a nivel cultural y económico, para que no cayesen en el olvido de las nuevas generaciones. Por este motivo, se constituyeron asociaciones de vela latina locales.
La lucha ha tenido efecto. En 2012 se constituyó la Federación Cultural Valenciana de Vela Latina para agrupar las asociaciones de Silla, Catarroja, El Palmar, Alfafar y El Perellonet, y en 2015 la Asociación de Vela Latina Els Peixcadors de Catarroja puso en marcha la primera escuela de navegación homologada con este tipo de velas y barcos, que hoy aprenden decenas de personas desde el Puerto de Catarroja. Además, en 2016 se consiguió la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) de esta actividad y técnica "que constituye una de las manifestaciones más representativas y valiosas de la cultura y de las formas de vida tradicionales de los valencianos".
Hoy, las asociaciones permiten revivir la época de esplendor de la vela latina con exhibiciones y regatas durante la primavera y el verano saliendo desde diferentes puertos hasta l'Albufera, donde el público puede contemplar la gran belleza de estas velas especiales en las embarcaciones típicas de la zona. Para disfrutarlo en primera persona, las próximas exhibiciones son el 31 de agosto, a cargo de la Asociación de Vela Latina de Alfafar; el 14 de septiembre, por la Tradicional de Silla; el 15 de septiembre por la Comunitat de Peixcadors de Catarroja; y el 21 de septiembre por la Asociación de Vela Latina de Silla.
'El tesoro de A el-buferet'
Este año la tradición de la Vela Latina se ha trasladado también al papel con la publicación del cómic 'El tresor d'Al-buferet', de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL) y la Diputació de València. Una historia creada y dibujada por Àlex Martínez y Andrea CL sobre una travesía en vela latina de dos hermanos de Catarroja, que tendrán que adentrarse en las aguas de l'Albufera para encontrar un tesoro muy especial. Y un nuevo espacio para hacer perdurar esta tradición que continúa uniendo generaciones y culturas.