El Ayuntamiento de Llíria, Ciudad de la Música, comparte con la Diputació su interés por la conservación del patrimonio cultural y musical de cientos de municipios. La corporación ha reforzado su gestión al respecto con un área específica para las Bandas de Música, mientras que la capital del Camp de Túria consolida sus premios Jaume I con un reconocimiento al trabajo que desempeñan las federaciones musicales, tanto en el ámbito autonómico como en el nacional.
En la gala que tuvo lugar el miércoles 9 d’Octubre, Día de la Comunitat, Llíria entregó sus premios a la Confederación Española de Sociedades Musicales (CESM), la Federación de Sociedades Musicales de la Comunidad Valenciana (FSMCV), el compositor y director Juan Vicente Mas, el gestor cultural Vicent Escrig y el Tribunal de las Aguas.
Cuatro de los cinco galardones están directamente relacionados con la actividad musical. La CESM por su defensa de los intereses de 1.100 sociedades musicales, con 80.000 músicos y 120.000 alumnos de escuelas de música, además de un millón de socios; la federación valenciana por su implicación en la vertebración del territorio desde el asociacionismo y el desarrollo cultural; Juan Vicente Mas, por su trayectoria en el mundo de la música; y Vicent Escrig, por su labor en el tejido asociativo de las bandas de música.
La Diputació de València, a través de la delegación de Bandas de Música que dirige el diputado Jordi Mayor, felicita a todos los premiados en esta segunda edición de los Jaume I de Llíria, incluidos el presidente de la CESM, Vicente Cerdá, y la presidenta de la Federación de Sociedades Musicales de la Comunitat, Daniela González, con la que se ha reunido esta misma semana, para abordar nuevos proyectos de colaboración. Todos ellos recibieron el galardón de manos del alcalde de Llíria, Manuel Civera.