La Diputació de València ha presentado la convocatoria del Certamen de Bandas de Música, que en 2020 celebra su 44ª edición repleta de cambios en diferentes aspectos como la localización del evento, el modelo de puntuación, el jurado o el número de secciones.
La novedad más llamativa es que el Certamen sale por primera vez de Valencia capital para desarrollarse en dos municipios diferentes. En concreto, el TAMA de Aldaia acogerá el fin de semana del 9 y 10 de mayo el concurso de las secciones tercera y cuarta; mientras que la sede de la Unió Musical de Llíria, localidad recientemente declarada Ciudad Creativa de la Música por la Unesco, será el lugar donde concurran las bandas de la primera y segunda sección.
El diputado de Bandas de Música, Jordi Mayor, ha informado que “a partir de ahora la intención es llevar el certamen al mayor número de pueblos posible, con la voluntad de que la ciudadanía de nuestras comarcas pueda disfrutar, en un ambiente festivo, de este importante acontecimiento”. Para reforzar el carácter participativo de la población, se ha previsto que las bandas acudan desfilando a los auditorios, para lo cual se ha creado un premio específico al mejor desfile, dotado con 1.000 euros.
Además, el número de secciones para la nueva edición se reduce a cuatro, aunque el número de bandas admitidas aumenta: hasta cuatro en la primera sección, y hasta seis en las secciones restantes. La cuantía de los premios para los ganadores también se incrementa: 3.500 euros para la primera sección, 3.000 euros la segunda sección, 2.500 euros la tercera y 2.100 para la cuarta.
Nuevos criterios de evaluación y obras obligadas
Con el objetivo de adaptarse a los estándares internacionales de baremación, la Diputació ha decidido ampliar los criterios de puntuación de cuatro a diez. Según Mayor, “esta nueva evaluación ayudará a que las calificaciones sean más objetivas y precisas, ya que se valorarán aspectos que hasta ahora no se tenían en cuenta de una manera específica, como la técnica métrica o de encaje”.En esta línea de impulsar la objetividad e independencia hasta las máximas cotas, por primera vez ningún cargo vinculado a la Diputació formará parte del jurado, que podrá tener carácter internacional y que, en todo caso, contará con profesionales cualificados del campo de la música.
En cuanto a las obras que deberán ser interpretadas, este año se pretende que sean las propias agrupaciones las que adapten estas piezas, “fomentando de este modo la creación musical”, en palabras del diputado. Las obras obligadas serán las siguientes:
Sección Primera: Gloses II de Amando BlanquerSección Segunda: Mare Nostrum de Miguel AsinsSección Tercera: Festa de les Falles de Ferrer FerranSección Cuarta: aún por determinar