"La temporada 2018-2019 es la más emocionante y ambiciosa artísticamente para mí". Así describe Josep Policarpo, director del Teatro Escalante de Valencia, la programación del nuevo ejercicio donde se ha apostado especialmente por las producciones propias y su internacionalización. Con una media de 30.000 espectadores y 150 exhibiciones desde 2016, el teatro continúa en proceso de establecerse en una sede fija y ofrece al público producciones nuevas con compañías que pretenden innovar y sorprender el público, según Policarpo y la diputada delegada de Teatros, Rosa Pérez, en la presentación de esta mañana.
Anna i la màquina del temps, por otro lado, es una obra de Dacsa Produccions que destaca por tener un fuerte componente audiovisual. En concreto, esta obra de ciencia-ficción se dirige a los más pequeños de la casa para despertar su imaginación y adentrarlos en una historia de aventuras donde el uso de proyecciones hará casi real el viaje al futuro de la protagonista.
Finalmente, de la mano de Crit Comanyia, el Teatro Escalante ofrecerá L'increïble assassinat d'Ausiàs March, un thriller medieval. El reto principal, según el director del teatro, está al "acercar y abordar los clásicos de la literatura medieval ahora", por eso, renueva la idea y plantea un thriller musical y hace más atractiva la historia, añade.
Equilibrio local, nacional e internacional
Tanto Rosa Pérez cómo Josep Policarpo han destacado que lo más interesante de la temporada 2018-2019 es el equilibrio en cuanto a la presencia local, nacional e internacional en las obras y las compañías. Para el director, la temporada pasada esta última línea había quedado más floja, por eso ahora se ha impulsado más para buscar un mayor enriquecimiento e intercambio de ideas. Así, en los próximos meses habrá propuestas procedentes de Italia, Bélgica, Países Bajos y Portugal de temática infantil."El Teatro Escalante se suma a las manifestaciones teatrales infantiles y colaborará con el festival Russafa Escénica, que trabaja esta temática". Con Lluna, del equipo holandés, una gran tela se transformará en una escena para crear una interesante experiencia visual a la cual le seguirá una coreografía infantil. Teatro delle Briciole, por su lado, reinventará el libro Pop-Up sobre un niño de papel y su bola que sufren varias metamorfosis. En tercer lugar, los belgas de Tof Théâtre interpretarán Piccoli Sentimenti sin voz para transmitir emociones a través de miradas y ruidos. Finalmente, la compañía portuguesa We Tum Tum representará la comedia musical para bebés Crassh Babies para estimular sus sentidos a través de la música.
Estas propuestas se suman al resto de programación que continúa otras temporadas, como es el caso de Nadal a l'Escalant, Menut Teatre o el ciclo de memoria histórica, para que cada tipo de público pueda disfrutar de temas variados para diferentes edades. Además, tal como ha indicado la diputada delegada de Teatros, Rosa Pérez Garijo, el Escalante volverá a rodar por los pueblos valencianos con el objetivo de impulsar la cultura y proponer nuevas ideas. Pérez, además, se ha mostrado orgullosa y optimisma al anunciar que esta temporada tiene un fuerte compromiso con la paridad: "el 50% de los equipos con que trabajaremos está formado por mujeres, cumplimos con nuestro objetivo".
Nueva temporada pero sin sede fija
La nueva etapa del Teatro Escalante, que gestiona la Diputación de Valencia, tiene como fin principal impulsar más la difusión, la exhibición y dar más apoyo a las compañías valencianas con producciones propias, han coincidido Policarpo y Pérez en la presentación. Sin embargo, el establecimiento del teatro en una sede fija continúa siendo una reivindicación y Pérez asegura: "no hemos renunciado a conseguirla porque queremos blindar nuestro proyecto".A pesar de la lucha del departamento de Teatro de la Diputación, los dos representantes han incidido en qué es el departamento de Patrimonio quien tiene que tomar decisiones. "Me he encontrado con una realidad difícil porque no tener sede fija ha multiplicado mucho el trabajo, pero el reto profesional y artístico para afrontarlo ha sido un gran estímulo", confiesa Policarpo. Así, Rosa Pérez ha explicado que cree que no es posible conseguirlo en esta legislatura pero que los gustaría establecerse en un tinglado de La Marina, aunque es una idea incipiente y esperan respuesta de Patrimonio. Como consecuencia, pronto se abrirá el plazo para que otros espacios conformen la escuela dramática de este teatro. De momento, las propuestas se representarán en el Teatro Martín y Soler del Palau de las Artes, Sala Russafa, Carme Teatro, Sala Matilde Salvador y el Teatro Rialto.