Un total de 160 funciones, distribuidas en espacios como la Sala Russafa, el Espai Inestable, el Teatro Rialto, el Palau de les Arts o la Sala Matilde Salvador, conforma la nueva temporada del Escalante. Una programación, para todos los públicos, en las que, sin duda, destaca la apuesta por las producciones propias que, este año, serán el estreno de 'Pi' y 'Les 7 diferències', así como la reposición de 'L'home invisible'.
Pero además, en esta nueva temporada del Escalante también se ha apostado por la renovación escénica, con el objetivo de captar nuevos públicos, pero también en la eficacia de la gestión. Para hablar de todo ello, València Extra ha hablado con Josep Policarpo, Director del Escalante.
Con una programación tan variada, ¿Qué espectáculos son los platos fuertes de la temporada?
He intentado modelar la presente temporada a partir de las producciones propias y de los 5 ciclos. Las producciones propias son el plato fuerte de la temporada porque son propuestas teatrales de gran envergadura, con una inversión económica muy importante y que, por otro lado, marcan la línea artística del Teatro Escalante. Además, completamos la programación con cinco ciclos con temática muy diversa y siempre singular que pretende responder a necesidades más específicas de nuestro público, tanto el escolar como el familiar. Hay ciclos como Música y Teatro, Escena Diversa, Menut Teatro, Nadal al Escalante , etc.
Tenéis tres producciones propias. ¿Es importante apostar por este tipo de espectáculos?
Es fundamental, sobretodo, para los profesionales valencianos de las artes escénicas. Son las que permiten armar espectáculos de gran formato, con repartos generosos y con una factura que no sería posible sin un espaldarazo institucional. Desde que asumí el cargo, he manifestado que había que ir introduciendo una cierta renovación escénica para garantizar la vitalidad del Escalante. Las dos nuevas producciones que presentamos este año serán PI, de la compañía Otradanza y LES 7 DIFERÈNCIES de la compañía El Pont Flotant. Tanto la elección de una cómo de la otra responden a esa idea de renovación escénica y de compromiso artístico. OtraDanza me parece una de las compañías de danza valenciana más rigurosas, más interesadas en experimentar con diferentes códigos de movimiento y de expresión. Por otro lado, El Pont Flotant es una de las voces más personales y potentes dentro del teatro valenciano. Las suyas son creaciones colectivas donde siempre abocan buena parte de sus vivencias y de sus ideas, y ese componente biográfico suele impregnar sus espectáculos de un humanismo reflexivo, contemporáneo y socialmente necesario. También contaremos con la reposición de otra producción propia: L'home Invisible, creada por la compañía La Pavana.
Primera vez que programas toda la programación del Escalante. ¿Qué responsabilidad supone?
Supone la responsabilidad asumida en el proyecto con el cual me presenté al concurso. Presentarse a un concurso público supone diseñar un proyecto a 3 años para el Teatro Escalante, fruto del análisis de los más de 30 años de trayectoria del centro y también de las transformaciones que ha tenido la sociedad en todos estos años. Redactar aquel proyecto fue una tarea muy laboriosa y ahora es una especie de biblia que traigo detrás y que reviso periódicamente. Es muy importante no apartarse de los principios que inspiraron aquel proyecto. Antes hablaba de renovación escénica, pero también he incidido mucho en todo este tiempo en la eficacia en la gestión. En este terreno creo que hemos avanzado mucho en poco tiempo.
El Teatro Escalante es todo un referente en la ciudad, ¿Qué representa este proyecto?
El Teatro Escalante es el proyecto escénico de la ciudad de Valencia con un mayor recorrido histórico y con una mayor incidencia sobre el público valenciano: más de dos millones de espectadores, 43 producciones propias, más de 5.000 representaciones y numerosos premios. Creo que las producciones del Teatro Escalante han conseguido una calidad y un reconocimiento en el ámbito del teatro para niños y jóvenes inusual en todo el Estado y esto es fruto de la apuesta continuada de la Diputación de Valencia. Todos estos datos hablan de la dimensión del proyecto y de la repercusión sobre el público. Es lógico que se haya convertido en un referente del teatro valenciano y también que haya jugado un papel fundamental en el crecimiento y consolidación de los profesionales valencianos de las artes escénicas, que lo han tenido como un punto de referencia permanente.
Por último, ¿Se necesita más fomento del teatro en general?
Hay que fomentar el teatro pero no sólo desde un punto de vista económico, sino también desde otras muchas perspectivas. Hay que conectar el teatro con la sociedad, renovando lenguajes, ofreciendo temas que resultan atractivos al público de hoy en día. Explorar la vertiente pedagógica del teatro, también la lúdica y, por supuesto, la reflexiva. Tenemos que ofrecer calidad y diversidad, tenemos que ser coherentes en nuestras programaciones, apoyar a nuestros autores y autoras, dar cabida a la mayor cantidad posible de profesionales... Hace falta un espaldarazo económico del teatro y hace falta un aprecio por el teatro, en cada uno de los ámbitos artísticos y de gestión. Nuestro trabajo continúa siendo muy artesanal y las personas tienen que ser el centro de atención. Esa es la mejor apuesta de futuro.