La Comunitat Valenciana es tierra de música. El 50% de las sociedades y escuelas musicales de toda España están presentes en el territorio valenciano, y su labor de integración, cohesión social y recuperación del patrimonio las llevaron a ser declaradas, el pasado mes de marzo, como Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial. Un potente movimiento cultural, formado por 550 sociedades musicales federadas, más de 1.100 bandas de música, más de 43.000 músicos, 60.000 alumnos, 200.000 socios, 600 centros educativos y más de 5.000 profesores, que requiere de un apoyo decidido para garantizar su supervivencia.
Y precisamente con ese objetivo surgió, en 2014, el programa ‘CaixaBank Escolta València’, un proyecto desarrollado por CaixaBank, en colaboración con la Federación de Sociedades Musicales de la Comunitat Valenciana (FSMCV) y el Institut Valencià de Cultura (IVC), que pretende no solo asegurar la continuidad de la actividad musical y educativa, sino situarlas en el centro de la cultura.
“Se trata del principal programa de ayudas que tenemos por parte de una entidad privada. Nuestras sociedades musicales, al ser sociedades sin ánimo de lucro e impartir educación no reglada, no tienen acceso a ningún tipo de beca pública. Por eso, este impulso de CaixaBank es muy importante. Gracias a las becas de formación, solamente este año hemos llegado a unos 700 alumnos”, explica Daniela González, presidenta de la FSMCV.
Las sociedades musicales representan un fenómeno social y cultural de enorme envergadura, que se reparte sin distinción entre pueblos y ciudades
Entre las distintas líneas de ‘CaixaBank Escolta València’ destacan las convocatorias anuales de becas para los alumnos y alumnas de la red de escuelas de música de la FSMCV; los festivales, concursos y ciclos de conciertos para el fomento del movimiento orquestal; así como acciones para la recuperación del patrimonio, como la creación de la Casa de la Música en la Alqueria Julià o la iniciativa ‘Música a la llum’, que consiste en rescatar del olvido las obras de compositores valencianos para grabarlas en un cedé anual consiguiendo, así, que perduren en el tiempo.
El compromiso de CaixaBank con la Comunitat Valenciana se ha ido extendiendo “desde este inicial apoyo a las sociedades musicales hasta llegar a acciones más amplias como los Premios al Talento Musical de la CV”, señala Xicu Costa, director territorial de CaixaBank en la Comunitat Valenciana. Y es que “como entidad cercana y vinculada al territorio en el que estamos presentes, pero también como parte de nuestras raíces, entendemos que es primordial apoyar la cultura musical valenciana, y más especialmente a las sociedades musicales, porque representan un fenómeno social y cultural de enorme envergadura, que se reparte sin distinción entre pueblos pequeños y ciudades y, sobre todo, que los valencianos y valencianas viven desde pequeños, porque la música se aprende desde la infancia y se comparte a lo largo de una vida”.
De esta manera, a través de este programa, se desarrollan acciones que acompañan a los músicos desde su formación hasta el reconocimiento de su esfuerzo y dedicación. Pero, además, han sabido adaptarse al impacto que ha supuesto la pandemia.
“En 2020, se registraron pérdidas de 25 millones de euros en contrataciones directas”
La pandemia ha frenado en seco la actividad de las sociedades musicales. “Solo en 2020, se registraron pérdidas de unos 25 millones de euros en contrataciones directas; y este año, hemos calculado unos 20 millones de euros de pérdida. Por tanto, aunque estas ayudas siempre son buenas, en estos dos años de pandemia han sido vitales para la supervivencia del tejido asociativo y musical”, afirma la presidenta de la FSMCV.
El programa ‘CaixaBank Escolta València’ ha impulsado, este 2021, nuevas iniciativas para adaptarse a la realidad derivada de la pandemia y mitigar el grave impacto que ha supuesto. Así, entre los proyectos que se han incluido destacan el curso de perfeccionamiento para los directores jóvenes de orquestas, el ciclo de conciertos ‘Música a la Llum – Conciertos en la Casa de la Música’, el ‘Festival de Orquestas’ o el ‘Ciclo de Conciertos CaixaBank de Orquestas de la Comunitat Valenciana’, a los que se suma el ‘I Festival de Orquestas Juveniles’.
Una serie de acciones que han permitido que los escenarios vuelvan a llenarse de música. “Ha sido muy complicado. Muchos ayuntamientos habían cancelado actos, y estos proyectos no solo se han mantenido, sino que se han reinventado para no dejar de lado a nuestras sociedades musicales, pero sobre todo para que la actividad musical que, al final, es nuestra razón de ser, volviera de nuevo a sonar”, recuerda Daniela González.
Un punto de vista que también comparte José Martínez Colomina, catedrático y doctor del Conservatorio Superior de Música de València y director titular, desde 2014, de la Universal Symphony Orchestra y de la Universal Chamber Orchestra, que reconoce que “el certamen de CaixaBank, además de ser clave para el crecimiento de las sociedades musicales porque se involucran al máximo, ha sido un incentivo muy importante para seguir adelante, trabajando”.
Gracias a las becas de ‘CaixaBank Escolta València’, hemos llegado, solamente este año, a unos 700 alumnos
Y entre las líneas maestras de este paquete de ayudas se encuentra también la primera convocatoria de ayudas a la música valenciana para mitigar el impacto de la crisis sanitaria que, como explicaba la directora adjunta de Música y Cultura Popular del Institut Valencià de Cultura, Marga Landete, “es un refuerzo más que se suma para contribuir a que la industria musical pueda seguir funcionando y creando con un poco más de tranquilidad".
Distribuidas en cuatro categorías, desde el programa 'CaixaBank Escolta Valencia' se han otorgado ayudas por valor de 5.000 euros a las empresas y a los emprendedores relacionadas con la actividad musical en la Comunitat Valenciana que se hayan visto obligados a paralizar su funcionamiento ordinario a causa de la COVID-19; ayudas a las formaciones musicales de carácter profesional por valor de 5.000 euros; ayudas de 2.000 euros para los centros educativos que desarrollen innovaciones para mantener la calidad educativa e impulsen proyectos de igualdad e inclusión social en tiempos de COVID-19; y finalmente, ayudas a las sociedades musicales que hayan desarrollado planes de contingencia para mitigar los riesgos de la COVID-19.
“En tiempos como estos, ‘CaixaBank Escolta València’ no podía ser ajena a las dificultades que estaban atravesando. Esta convocatoria nos ha permitido llegar a un gran número de empresas, escuelas, músicos y sociedades de toda la Comunitat Valenciana y, de esta manera, hemos invertido en la vertebración del territorio, en la integración social y en conectar la tradición con el futuro”, ha destacado Costa.
Las becas anuales, una barrera a la exclusión social
Por último, otra de las patas clave de las líneas estratégicas de ‘CaixaBank Escolta València’ son las becas anuales destinadas al alumnado que cursa estudios en las escuelas dependientes de las sociedades musicales. Su objetivo no es otro que fomentar desde edades tempranas el estudio de la música, así como incentivar su continuidad independientemente de los recursos económicos.
Desde su puesta en marcha en el curso académico 2014-2015, se han beneficiado más de 5.800 alumnos, con una inversión total de más de 2,4 millones de euros. En concreto, en la pasada edición 2020-2021 fueron becados un total de 710 estudiantes procedentes de 181 sociedades musicales de toda la Comunitat Valenciana.
Sin duda, una acción necesaria para contribuir al desarrollo de la actividad musical prestando apoyo a los futuros músicos, y que sirve de barrera frente a la exclusión social. Pues como bien explica la presidenta de la FSMCV, “gracias a estas becas, familias que se encuentran en situación de vulnerabilidad pueden seguir apostando por la educación musical. Además – añade Daniela González – si a estas becas, le sumamos el impulso que ha experimentado el movimiento orquestal, hemos logrado abrir mucho más el abanico formativo para que un estudiante pueda elegir”.
“En la Comunitat Valenciana, somos muy conocidos por nuestros instrumentos de viento, que son nuestras bandas, pero a nivel de cuerda parecía que tenía que venir todo de fuera. Ahora, podemos ver que, en nuestra comunidad, tenemos talentos increíbles y con esta línea de ayudas y acciones para promover la actividad musical, vamos a conseguir relanzar todo nuestro potencial”, destaca González.
‘CaixaBank Escolta València’ ha sido, desde el primer momento, el proyecto estrella. “Y no solo por la cuantía económica, que también, sino por todo lo que representa”, remarca la presidenta de la FSMCV. Y es que esta iniciativa que surgió hace ya siete años ha logrado consolidarse como el motor para mantener viva la identidad valenciana a través de su música.