Cultura

Los artistas falleros ya esbozan las Fallas de 2025: "Nuestro reto es reivindicarnos como oficio profesional"

Paco Pellicer, Maestro Mayor del Gremio de Artistas Falleros de València, insiste en la concienciación para realizar Fallas que vayan acorde a su presupuesto para obtener un beneficio digno y real

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Artista fallero

Quedan casi diez meses para que el aroma a pólvora y la sátira vuelvan a invadir las calles de València, pero la maquinaria ya comienza a funcionar. Los artistas falleros ya están inmersos en los preparativos de las Fallas de 2025, aunque lo hacen con retos pendientes. Avanzar en la dignificación de su profesión o proteger la plena libertad de la fiesta son algunos de ellos. 

Precisamente, las Fallas Municipales de València para 2025 ya se han presentado al público para hacer un poco más amena la espera. El jurado ha escogido la propuesta de Alejandro Santaeulalia y Vicente Llácer ‘Fauna Fallera’ para el monumento grande; mientras que la Falla Municipal Infantil la firma José Gallego bajo el lema ‘Anem de cap’. Dos propuestas conocidas este jueves en medio de críticas y disconformidad con el proceso. ¿Cómo se esbozan las fiestas josefinas del año que viene?

Comienzan las contrataciones

Las comisiones falleras ya cuentan con sus respectivos presupuestos y con una partida destinada a su falla mayor e infantil, por lo que el siguiente paso es escoger al artista que dará forma al principal elemento de la fiesta para 2025. En este sentido, Paco Pellicer, Maestro Mayor del Gremio Artesano de Artistas Falleros de València, explica que “ahora mismo ya hay quienes tienen sus contratos firmados, pero hasta mediados o finales de junio se espera finalizar con los acuerdos para presentarlos a Junta Central Fallera (JCF) y comenzar así el calendario de trabajo de cada uno de ellos”. 

Este año, cuenta, no ha habido grandes variaciones respecto a los presupuestos que presentaron las comisiones el año pasado, “cada una de ellas siempre hace todo lo posible por reservar una buena partida a ello”, aunque sí hay una diferencia entre el sector de artesanos: “Tenemos que concienciarnos más que nunca de hacer el trabajo conforme a lo contratado y no excedernos, para poder obtener beneficios. Hemos visto cómo artistas de Sección Especial dejan de plantar porque no les compensa y no queremos que se repita, debemos pensar bastante más antes de explicar a las comisiones qué vamos a hacer con ese presupuesto”. 

Piezas de una falla en un taller de artistas falleros

Según Pellicer, esto supone afinar mucho más todo aquello que implica plantar la falla, más allá de su realización, “como los seguros que necesitamos, los transportes, la gente que tenemos que contratar para realizar la falla o plantarla”. Así, explica que normalmente las comisiones no son conscientes de todos estos aspectos, “normalmente porque una vez está formalizado el contrato presentamos un boceto pero no un presupuesto desglosado”. “Por ello, no hay mucha diferencia respecto al año pasado, la diferencia debe estar en lo que nosotros podamos ofrecer con esos presupuestos”, insiste. 

El maestro mayor también destaca que, una vez comience el diseño de las obras, se procurará apostar por materiales lo más sostenibles posibles, “algo en lo que las empresas fabricantes han evolucionado en los últimos años de forma notable”: “Nuestra intención es buscar la fórmula para que el material sea lo menos contaminante tanto durante nuestra manipulación como cuando se queme”. 

Aunque muchas de las fallas de Sección Especial ya han anunciado a sus artistas para 2025, no siempre es fácil. José Luis Ceballos, que trabaja junto a Paco Sanabria, señala que eran candidatos a la Falla Municipal de 2025 y habían “trabajado especialmente en el boceto de esta propuesta”, pero finalmente no han sido escogidos por el jurado, por lo que continuarán trabajando en nuevas fallas. “Este año nos está costando más que otros y nos encontramos con presupuestos bajos o con un sello propio que no acaba de encajar con otros estilos que sí son más buscados por las comisiones”, explica Ceballos. 

El artista reconoce que “las comisiones hacen todo lo posible por guardar su presupuesto para la falla, pero muchas veces queremos hacer mucho con poco y al final acaba siendo insostenible. Creemos que es necesaria más ayuda institucional para mejorar nuestras condiciones”, reivindica. 

Preservar la sátira y el ingenio y ser un ejemplo

Presentación bocetos Fallas Valencia 2025

Por otro lado, las Fallas Municipales de 2025 no se han escogido sin polémica. Este es el primer ejercicio fallero completo para el nuevo equipo de gobierno y una de sus primeras acciones en la organización de la fiesta ha sido establecer en las bases que los comités de selección estén formados por nueve componentes, de los cuales siete sean propuestos por los grupos municipales por cualificación y manteniendo su proporcionalidad en el pleno del Cap i Casal.

Un cambio criticado por la oposición -Compromís y PSPV-PSOE- que finalmente se ha saldado con que Compromís ha renunciado a designar a sus representantes. Para el Gremio de Artistas, en boca de Pellicer, “si se mantiene este modelo lo importante es que sean jurados independientes”. Ceballos y Marina Puche, que el año pasado fueron los encargados de plantar la Falla Municipal Infantil, coinciden en que es necesario que sean “representantes cualificados” y que vengan del sector del diseño, la ilustración, la escenografía o “incluso que sean del mundo fallero” y hagan una valoración justa.

Asimismo, en las bases de este año también se ha planteado que “serán eliminadas las propuestas que no respeten la objetividad y respeto que deben reflejar las fallas municipales”, lo que para la oposición ha sido un signo de censura. Pellicer apunta que “las fallas siempre van a tener sátira e ingenio, pero es cierto que las municipales de 2025 son más blancas, menos críticas”. 

Por otro lado, para el Maestro Mayor lo que es “menos acertado” es que para presentarse al concurso los artistas hayan tenido que presentar bocetos directamente. “Siempre hemos luchado para que las comisiones no escojan a sus artistas por bocetos y desde el Ayuntamiento, que es quien debe dar ejemplo, este año no se ha hecho así. Esto implica que si quieres presentar tu propuesta a diez fallas tienes que dedicarle tiempo a hacer tú mismo el boceto - con la posibilidad de que no sea elegido - o contratar a quien te lo hace, dedicando tiempo y dinero”. 

Dignificar la profesión sigue siendo un reto pendiente

¿Qué piden para las Fallas de 2025? El Gremio de Artistas Falleros tiene claro que el principal reto es conseguir que el oficio sea reconocido como oficio profesional, “lo que permitirá conseguir más fuerza para crear un convenio anual que regule nuestra situación laboral y, sobre todo, por reivindicarnos como constructores de fallas, escenografías, stands o decoraciones en general, para dar más valor al término de ‘artista fallero’”. En ello coincide Ceballos, que también añade la mejora y modernización de los talleres, así como esa autocrítica de trabajar en base al presupuesto “y trabajar así de forma sostenible y digna”.