El Ayuntamiento de València destinó en 2018 más de 668.000 euros para apoyar a hogares que no pueden hacer frente a las facturas del agua, gas o electricidad. "En València ya no se corta ni la luz ni el agua a ninguna persona por razones económicas", señaló el Alcalde Joan Ribó durante el balance económico del mandato.
Según datos del Ayuntamiento, desde el consistorio ayudaron a un total de 1.678 personas durante el año pasado a pagar la factura del agua. Ello junto a otra cifra que consideran positiva: las personas necesitadas de apoyo municipal y, por tanto, en riesgo de pobreza y/o exclusión, se han reducido un 12,71% respecto a 2017. En cifras, esto supone aproximadamente 230.000 euros. La partida destinada a ayudar en los pagos de las facturas de luz es la más elevada, con 370.000 euros.
En consonancia con estas medidas está también el desarrollo de convenios con las empresas suministradoras para evitar cortes en agua, luz o gas, e incluso para reactivar el suministro si ya se había cortado con anterioridad.
La Concejalía de Servicios Sociales, encabezada por Consol Castillo, es la encargada de gestionar estas ayudas. Con el fin de mejorar la eficacia y universalización de estas entre quienes les haga falta, todos los grupos políticos del ayuntamiento aprobaron, en noviembre, el primer Plan de Servicios Sociales. El plan contempla el trabajo conjunto de hasta 28 servicios municipales que afectan a todas las concejalías, y pretende ofrecer consejos, recursos y soluciones a la población en riesgo de exclusión social.
3.431 ayudas
Según un estudio de la Universidad de Valencia (UV) que la Concejalía encargó de cara a la aplicación del programa, un 26,7% de los vecinos censados en el Cap i Casal están en riesgo de exclusión social o extrema vulnerabilidad. Una cuarta parte de la población de la capital. Son 87.023 hogares, en los cuales hay 211.133 personas.El plan, que entra en funcionamiento este año y tiene previsto funcionar hasta 2023, cuenta con una dotación inicial de 1,6 millones de euros. "Nos hemos aplicado desde el primer minuto en la lucha decidida y firme contra la pobreza energética", aseguró Castillo.
Dentro de este programa, además de cuestiones de suministros, también se contempla la asistencia a personas sin hogar. Hasta ahora, en especial en invierno, las campañas se centraban en aumentar las plazas en albergues. La nueva intención es doblar los pisos tutelados, para así buscar además una mayor autonomía de las personas asistidas.
Estos 668.000 euros se distribuyeron entre 3.431 ayudas para combatir la pobreza energética. Sin embargo, las ayudas se realizan con un seguimiento y los pagos se hacen en muchas ocasiones a las compañías de suministros con el fin de evitar fraudes.
El Govern de la Nau tiene, con el fin de evitar llegar a casos extremos, la Oficina Verde. Se trata de un servicio presente en los 11 centros municipales de la ciudad en los que se ofrecen de forma gratuita, recomendaciones para el ahorro energético concretos a cada caso. También aquí se ofrece información sobre estas ayudas a quienes lo necesiten.
Según aseguró Ribó el miércoles durante la reunión del Consejo de Administración de la Empresa Mixta Valenciana de Aguas, su Gobierno pretende acabar con la vulnerabilidad: "Mantenemos nuestro compromiso para que ninguna persona en València se quede sin agua o sin luz por no ser capaz de pagarla".