Joan Ribó ha anunciado que el Ayuntamiento se propone hacer del nuevo cauce del Túria un corredor verde que conecte el Parque Natural del río con el Parque Natural de la Albufera. Lo ha hecho en el Debate sobre el Estado de la Ciutat celebrado ayer, donde el alcalde rindió cuentas e hizo propuestas ante los grupos municipales para analizar la situación de Valencia y del Ayuntamiento.
Se trata, en palabras del alcalde valenciano, de un "proyecto de largo alcance" que conectaría los dos parques naturales (incluyendo el Parque de Cabecera del antiguo cauce del río Túria) "mediante la renaturalización del nuevo cauce del río". En concreto, ha avanzado que el Govern de la Nau ya está trabajando en este corredor y ha explicado: "En una fase inicial solicitaremos a la Generalitat la modificación y ampliación del Plan de Ordenación del Parque Natural (PORN) del Túria para programar y, en un futuro realizar, las mencionadas conexiones porque para los valencianos y valencianas, el nuevo cauce del Túria también es nuestro y también lo queremos verde".
Así, ha detallado que hay más de 1.500 hectáreas de suelo para prevenir inundaciones (sin contar la zona que va desde la autopista de Alicante hacia el mar, que está inundada), un elemento que Ribó considera "importante" para prevenir el cambio climático. Sin embargo, ha aclarado que ese tramo en concreto normalmente está seco y no tiene ninguna utilidad pero que el objetivo es que se pueda naturalizar "como el Manzanares en Madrid, el Besós en Barcelona o el Segre en Lleida, que a la vez que previenen inundaciones actúan como parques fluviales".
Además de este proyecto, el alcalde de Valencia también se ha referido al medio ambiente y a la creación de espacios verdes mediante otras acciones. En concreto, "para conseguir una ciudad más verde, como piden los valencianos y las valencianas", ha dicho, se iniciarán los trabajos del Parque de Nazaret sobre el antiguo cauce del río en unos terrenos cedidos por el Puerto que tendrán que culminar el Jardín del Túria en el nuevo Parque de Desembocadura. Lo hará en las próximas semanas, ha asegurado Ribó.
Aprovechando su turno de palabra en el último debate, ha recordado que cuando empiece la parada vegetativa de los árboles, el equipo de gobierno pondrá en marcha el proyecto de reposición del arbolado urbano en los alcorques vacíos, que cuenta con un presupuesto de 2,1 millones de euros de "DecidimVLC 2017". En concreto, se trabajará en la plantación de 3.270 árboles nuevos, la ampliación de la superficie de más de 1.800 alcorques y la instalación de riego en más de 900 árboles.
"Los jardines enriquecen el paisaje urbano, realizan un papel de oxigenació de la ciudad, contribuyen a la regulación hídrica, reducen el impacto de la ciudad construida sobre el medio ambiente y ofrecen un ecosistema urbano apropiado para la conservación de la biodiversidad. Son uno de los principales articuladores de la vida social", ha manifestado. En este sentido, ha defendido esta línea de su mandato recordando que las inversiones en zonas verdes están presentes en todos los barrios de la ciudad con un aumento del 177% del presupuesto. "Hemos avanzado mucho y ahora estamos redactando el proyecto de ampliación del Parque de Benicalap y el Parque de Coves Carolines de Benimàmet", ha concluido.
Este ha sido el último Debate sobre el Estado de la Ciutat de la legislatura, un formato recuperado por el Gobierno de la Nave después de veinte años y que pretende no sólo que los grupos municipales analizan y hagan propuestas sobre la situación de Valencia y de la institución pública, sino que entidades ciudadanas puedan tener voz en un Pleno extraordinario.