El pasado jueves, el partido animalista PACMA finalizaba su campaña 'Festa sense Bous. Tallem la Tortura', que tenía como objetivo la recogida de firmas para solicitar tanto al gobierno catalán, como al valenciano, la prohibición de los correbous.
A las 73.000 firmas que se han recogido, PACMA ha añadido diferentes imágenes para apoyar esta petición. Valencia Extra ha hablado con Raquel Aguilar, coordinadora provincial de PACMA en Valencia, y esto es lo que nos ha contado:
Una vez finalizada la campaña, ¿Cuál es el sentimiento generalizado en PACMA?
En PACMA hemos documentado durante todo el verano las terribles y diversas modalidades de correbous y bous al carrer, con el objetivo de constatar el sufrimiento y estrés al que se somete a los animales. Estas grabaciones han formado parte de nuestra campaña de recogida de firmas y hemos conseguido que más de 73.000 personas hayan firmado para dar apoyo a nuestra solicitud de poner fin a los mal llamados "festejos" taurinos, en que se maltrata animales y cuyo final es la muerte, aunque ésta no tenga lugar siempre en público.
Este importantísimo número de firmas, lejos de sorprendernos, suponen una muestra más de que la sociedad está evolucionando, y la indiferencia va dejando paso al activismo por la defensa de los derechos de los animales. Y nos sentimos con esperanza porque el fin de estos actos de barbarie cada vez está más cerca.
¿Cuál es el siguiente paso?
Nos gustaría que nuestros actuales gobernantes fuesen valientes y actuasen conforme a la ética y no únicamente pensando en votos, y decidiesen dar un paso al frente prohibiendo estos actos de crueldad hacia los animales amparados en el nombre de la tradición. No obstante, desde PACMA vamos a seguir trabajando por hacer visible el maltrato a que son sometidos estos toros, vacas y becerros, concienciando a la sociedad de que, aunque la sangre no siempre está visible, esta "fiesta" siempre termina en muerte y denunciando todas las irregularidades que detectamos, que no son pocas.
¿Cuál es vuestra opinión acerca de los correbous?
Cada año, en nuestro territorio, miles de toros, vacas y becerros son utilizados en los mal llamados “festejos” populares. Estos actos, además de cuantiosos costes económicos (directos e indirectos) y accidentes que se cobran vidas humanas, suponen un intenso sufrimiento, tanto físico como psíquico, para los animales que son obligados a participar en ellos.
Pese a que no siempre vemos sangre, a estos animales se les infiere daños graves por manipulaciones, transporte, hambre y sed y hacinamiento, además de las agresiones y hostigamiento a que se ven sometidos en las calles y plazas. También padecen estrés, ansiedad y una intensa sensación de miedo, al ser separados de su manada (son animales gregarios), encontrarse en un ambiente desconocido, hostil y en situación de indefensión.
En pleno siglo XXI, en la era tecnológica, donde el ser humano, con su imaginación y creatividad es capaz de inventar todo tipo de alternativas de ocio, parece impensable que se sigan realizando estas involucionadas prácticas, más propias de la Edad Media. Por lo anteriormente expuesto, rechazamos rotundamente el maltrato que soportan los animales tanto en los correbous catalanes, como en los bous al carrer valencianos, sea cual sea la modalidad empleada (vaquillas, embolados, bous al mar, becerradas, encordados, etc.).Estamos a favor de las fiestas, pero nadie debe sufrir en ellas.
¿Se puede llegar a un acuerdo entre los defensores de los correbous y PACMA?
Cuando en una sociedad, se considera que un determinado comportamiento es impropio e inaceptable, existen tres vías para su resolución: la información, la educación y la regulación legislativa. En el caso que nos ocupa, y dada la cantidad de animales que cada año sufren en nuestras calles y plazas, con el único fin de divertir a una muy reducida parte de la sociedad, es urgente realizar la única modificación legal éticamente admisible: arrancar el estigma que supone para estos animales la tradición y protegerlos, mediante la ilegalización de su maltrato, del mismo modo que ocurre con el resto de animales. La única vía admisible para las personas que formamos PACMA es su abolición.
¿En qué acciones estáis trabajando actualmente?
De forma habitual trabajamos denunciando la terrible situación que viven los animales en la provincia de Valencia, concienciando a la sociedad y proponiendo políticas alternativas y mejoras legales que protejan a los animales.
Algunas de las acciones que estamos llevando a cabo en estos momentos son: Dar visibilidad a los gatos que viven en colonias en nuestros municipios, cuya supervivencia depende de la voluntad de los/as alimentadores/as que invierten muchos recursos, tanto económicos, como de tiempo en su cuidado, ya que la mayoría de autoridades municipales cierran los ojos frente a este problema, pese a las competencias municipales en materia de protección animal, es uno de los proyectos en que llevamos años trabajando.
Trabajamos también realizando propuestas a las ordenanzas municipales para que incluyan una mejor protección hacia los animales. Estamos a la espera de la modificación de la actual Ley Autonómica de Protección Animal, que tiene ya 22 años y cuya propuesta presentamos hace unos meses a la Consellería de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural.
Por otra parte, estamos realizando un estudio sobre el abandono de animales en la provincia de Valencia y la situación de las protectoras de animales para presentar una propuesta ética alternativa a la mercantilización de la muerte de estos animales de compañía abandonados que ofrecen muchos de nuestros ayuntamientos a empresas que se lucran con su muerte.
Y tenemos en marcha varias denuncias por maltrato, una de ellas hacia cientos de ovejas que un ganadero abandonó y cuyas supervivientes han estado conviviendo con los cadáveres de sus propias compañeras.