La Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio ha completado el proceso de traspaso de actividad y gestión de las Infraestructuras Ferroviarias y Tranviarias de la Generalitat con objeto de mejorar su gestión.
Hasta el momento, Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV), además de explotar el servicio de metros y tranvías, era titular y gestionaba la mayoría de las infraestructuras ferroviarias y tranviarias de la red de Metrovalencia y TRAM de Alicante. A su vez, Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE), era titular y gestionaba las infraestructuras que construyó.
Para ordenar de forma óptima las competencias de los distintos entes y mejorar la eficiencia económica y de gestión, la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, a través de la Orden 2/2016, de 15 de febrero, aprobó el catálogo de infraestructuras ferroviarias y tranviarias de la Generalitat Valenciana y su adscripción a efectos de administración.
Como hecho más destacable, EIGE deja de ser administrador de infraestructuras ferroviarias y su actividad en este sentido se traspasa por completo a FGV.
Con el acuerdo suscrito entre los gerentes de FGV, Angel García de la Bandera, y EIGE, Helena Beunza, se ha cerrado el proceso de transferencia de las infraestructuras ferroviarias y tranviarias que gestionaba EIGE. Para materializar el traspaso a FGV, se ha aprobado la cesión de activos y pasivos adscritos a la actividad ferroviaria en EIGE, así como de los trabajadores de la entidad dedicados a la actividad ferroviaria.
Entre las infraestructuras que pasa a gestionar de manera directa FGV se encuentran, entre otras, la Línea 2 del TRAM de Alicante, la ampliación de Metrovalencia a Riba-roja de Tùria, las obras de la futura T2 de Valencia o los tramos subterráneos construidos en Alboraya y Benimàmet, con sus correspondientes estaciones.
García de la Bandera ha explicado que "con esta decisión, resultado de la apuesta decidida de la Generalitat por el transporte público y una gestión eficiente del mismo, FGV refuerza su posición como empresa pública dedicada a la explotación y gestión de sus propias líneas, alejándose de las opciones concesionales o posibles privatizaciones que se barajaron en el pasado".
Para el director gerente de FGV "el cierre de este proceso de transferencia refuerza la posición de la empresa y permite establecer una forma más práctica y eficiente de gestionar la red autonómica, en la que solo un ente será el encargado de explotar el día a día de la infraestructura y de los servicios que presta".
De esta forma, FGV además de operar el servicio, como ya hacía hasta ahora, gestionará todas las infraestructuras de transporte ferroviario y tranviario de titularidad autonómica, tanto en servicio como en proceso de construcción.