Las Brigadas Forestales de Divalterra, junto a efectivos del Consorcio de Bomberos de Valencia y unidades de Bomberos Forestales de la Generalitat, han llevado a cabo quemas controladas en San Antonio de Requena, tras las peticiones de los agricultores locales.
Y es que la zona sufre una superpoblación de conejos que afecta a la agricultura, provocando importantes daños en los viñedos. Las quemas controladas se han realizado fundamentalmente en cultivos abandonados cercanos a los viñedos y, de esta manera, se ha logrado alejar a la población de conejos de la tierra cultivada.
Las operaciones de quema han sido dirigidas por el Técnico Forestal del Consorcio de Bomberos de Valencia, Raúl Quílez, quien señala que con este tipo de quemas controladas "al final lo que hacemos como Diputació y como Consorcio es conciliar los intereses rurales de los municipios". Y no es el único beneficio, ya que gracias a estas quemas en campos abandonados "se reduce el riesgo de que se produzcan incendios al romper la continuidad vegetal", señala Quílez.
El operativo ha estado apoyado por agentes medioambientales para la delimitación de las parcelas a quemar, y por el personal del servicio de mantenimiento de Carreteras para realizar el control de tráfico de la carretera que discurre junto a las parcelas de quema.
No es la primera vez que se realizan este tipo de quemas controladas, que tienen ya una larga trayectoria.
Participación de las Brigadas Forestales de la Diputació
La colaboración de las brigadas forestales de la Diputació de València en las quemas controladas dirigidas por el Consorcio de Bomberos es habitual.En este caso, la labor de los efectivos de Divalterra se ha centrado en las funciones dentro del equipo de seguridad, llevando a cabo el apoyo en los tendidos de mangueras de la autobomba de los bomberos forestales de la Generalitat para el control de los perímetros, además de las labores de vigilancia.
Asimismo, en la quema controlada de San Antonio de Requena, uno de sus responsables de sector ejerció de Jefe de Seguridad, bajo las directrices del Técnico Forestal Raúl Quílez, encargado de dirigir las operaciones.
Cabe mencionar que el alumnado de los Ciclos Formativos de la Escuela de Viticultura y Enología de Requena, perteneciente a la Diputació de València, pudieron presenciar las labores durante la ejecución de la quema controlada.