El Ayuntamiento de Carcaixent enriquece su fondo archivístico con una copia de todos los documentos y material que sirvieron para los trabajos de restauración del Monasterio de Santa Maria de Aigües Vives.
Se trata de material inédito, elaborado por el pintor José Benito Máñez, y que utilizó para llevar adelante la restauración pictórica del inmueble a lo largo del periodo 1976-1984, una vez fue adquirido por el fotógrafo Antonio Vidal.
Ahora la familia de José Benito ha querido poner a disposición del Ayuntamiento esta colección formada por fotografías, informes técnicos, dibujos esgrafiados, diseños profesionales y también un video, la cual quedará depositada al Archivo Municipal y se remitirá una copia a la Consellería de Cultura, puesto que se trata de un material de gran valor que puede ayudar en futuras actuaciones en el monasterio.
Hay que recordar que el edificio, ubicado al término de Carcaixent, que fue construido durante los siglos XVI y XVII y declarado en el 2007 Bien de Interés Cultural, actualmente está previsto que paso a propiedad de la Generalitat Valenciana a través de la compra, y como consecuencia del proceso de presupuestos participativos.
Para el alcalde de Carcaixent «es una suerte que la familia de José Benito haya tenido este gesto con su pueblo, puesto que además de enriquecer el fondo archivístico municipal, la aportación de los materiales que ahora han realizado será una ayuda de gran valor cuando se aborde la necesaria rehabilitación y restauración del monasterio, en cuanto que permitirá recuperar el aspecto original de las pinturas que en su momento dieron esplendor en este edificio emblemático para Carcaixent y el Valle de Aigües Vives. Por eso estamos muy agradecidos y lo manifestamos públicamente. De este modo se avanza un poco más si cabe en el proceso de recuperación iniciado con los presupuestos participativos, la manera más realista de salvar el Monasterio. Ahora solo queda esperar que las diferentes consellerías implicadas aceleren el expediente del proceso de compra, y que esta sea una realidad en un tiempo prudencial, para no defraudar las expectativas de la ciudadanía, que ven en la compra la única salida viable para el antiguo monasterio de la orden de los Agustinos».