El presidente de la Diputación de Valencia, Jorge Rodríguez, ha participado este miércoles en uno de los actos centrales de las fiestas de la Preciosísima Sangre de Picanya, que ha coincidido además con la renovación del hermanamiento de este municipio de l’Horta Sud con la población francesa de Panazol.
En el Centre Cultural de Picanya, en presencia del alcalde, Josep Almenar, sus homólogos de Panazol y la localidad alemana de Mark Erlbach y los diputados Bartolomé Nofuentes y Xavier Rius, Rodríguez ha destacado la importancia de este tipo de hermanamientos entre municipios valencianos y de otros países europeos. “La Europa que nos une, más que la de las alianzas económicas, es la de la alianza entre sus pueblos, su cultura y sus tradiciones”, ha asegurado el presidente de la Diputación.
El acto, además de la consolidación de los vínculos entre Picanya y Panazol, ha contado con una primera parte en la que el Ayuntamiento ha reconocido la tarea de representantes de distintos ámbitos socioculturales de Picanya, entre ellos el poeta valenciano Marc Granell, a quien ha entregado el premio el presidente de la Diputación.
En el marco de las fiestas de Picanya, Jorge Rodríguez se ha referido también a las tradiciones y celebraciones populares que “se convierten en el mejor escaparate de los municipios valencianos de cara al mundo”. Rodríguez ha deseado a todas las vecinas y vecinos de Picanya que tengan unas buenas fiestas y ha señalado que “la Diputación seguirá apostando por nuestras costumbres y tradiciones, porque sirven para difundir el legado histórico y cultural de nuestras comarcas”.
“Por encima de todo, las fiestas son convivencia y estrechan los vínculos entre los colectivos y asociaciones que dan vida al tejido social de los pueblos”, ha añadido el presidente de la Diputación de Valencia en su intervención en uno de los actos centrales del día grande de las fiestas de Picanya.