Hace unos pocos días se conocía la noticia de la detención de un hombre acusado de ser el presunto autor de los delitos de asesinato e incendio provocado en el que resultó muerta su mujer, María Amparo Cortés, vecina de Mislata. Los hechos ocurrían el pasado 24 de diciembre de 2020. Tras confirmarse por parte de la Delegación de Gobierno contra la Violencia de Género de que se trata de un nuevo crimen machista, el alcalde, Carlos Fernández Bielsa, decretaba un día de duelo oficial en el municipio, así como invitaba a la ciudadanía a concentrarse a las puertas del consistorio para guardar un minuto de silencio.
Se trata de la primera víctima mortal por violencia de género en Mislata. Y en el contexto de no poder mirar hacia otro lado y visibilizar este crimen, “el Ayuntamiento de Mislata, como la administración más cercana a la ciudadanía que es, tiene el deber y la obligación de condenar de manera inmediata el asesinato de M. Amparo. Ya no hablamos de una condena en abstracto como hacemos en cada Pleno y cada primer martes de mes a las puertas de la Casa de la Dona, ahora hablamos de M. Amparo Cortés, nuestra vecina, le ponemos cara al horror y a los asesinatos machistas”, afirmaba el Bielsa en la lectura del manifiesto.
Es por ello que, antes de la concentración, se convocaba un Pleno Municipal extraordinario y urgente a propuesta de alcaldía para condenar el asesinato de María Amparo Cortés y en contra de la violencia machista. El texto de la moción planteada fue acordado y votado a favor por 20 de los concejales y concejalas del consistorio, pertenecientes al Partido Socialista, Partido Popular, Ciudadanos y Compromís, y contó con el voto en contra del concejal de Vox, que de esta manera impedía que la moción de repulsa a este crimen y de condena a la violencia machista pudiera trasladarse como declaración institucional del Ayuntamiento de Mislata.
Bielsa también afirmó enérgicamente que la violencia contra las mujeres “tiene que desaparecer, las mujeres no pueden ser consideradas ciudadanas de segunda, han de ser libres en sus relaciones de pareja, que se han de basar en la igualdad, el respeto y el buen trato”. Y añadía que la violencia de género “no puede considerarse un problema exclusivo de la esfera privada de las mujeres, todas las administraciones públicas y la sociedad en general, deben participar en la erradicación de esta lacra social. Ya no es un delito invisible, sino que produce un rechazo colectivo y una evidente alarma social. Por lo tanto, es responsabilidad de todas y de todos no mirar hacia otro lado”.
A este Pleno Municipal extraordinario le siguió una concentración a las puertas del Ayuntamiento, en la que, acompañado de toda la corporación municipal, el alcalde volvió a leer ante la ciudadanía el manifiesto acordado minutos antes en el Salón de Plenos. Las decenas de vecinas y vecinos que se concentraron guardaron un minuto de silencio en repulsa del asesinato machista de su conciudadana María Amparo Cortés, así como también por Cristina Blanch, la joven vecina de Valencia asesinada brutalmente por su pareja hace unos pocos días.