València Extra se traslada al centro juvenil Gent Jove de Aldaia para preguntar a Guillermo Luján, alcalde de la localidad, y al concejal de Comercio, Santi Ruiz, sobre las ayudas del Fondo de Rescate de Aldaia, impulsadas por el consistorio municipal en el contexto de la pandemia.
¿Por qué estas ayudas son tan singulares?
Guillermo Luján: Eso me hace un poco recordar los momentos difíciles que pasamos en el mes de marzo de 2020. Eran momentos de pandemia, de restricciones; pero de restricciones y limitaciones no a todos los sectores ni a todo el comercio.Recuerdo que había sectores que estaban eminentemente penalizados porque les obligaron a cerrar y otros que no. A partir de ese momento, desde la administración ,se planteaban ayudas y soluciones. Y, como es lógico, el Ayuntamiento tenía unas limitaciones presupuestarias y si tiene un capital para poder ayudar, tiene dos opciones: o repartirlo linealmente entre todos los comerciantes; o buscar una manera, que es lo que intentamos, de ayudar más a quien más lo necesite.En esas semanas, recuerdo perfectamente tener conversaciones con personas conocidas del mundo de la banca, gestorías, incluso directores de bancos de Aldaia para detectar cuál era la situación del sector económico, qué sectores estaban más perjudicados y beneficiados por unas ayudas, como las líneas ICO, por ejemplo.Nuestra idea era detectar de qué manera esa aportación municipal pudiese ser más efectiva y que llegara más a quién más lo necesitaba.Entonces, en base a esa filosofía, empezamos a trabajar y, lógicamente, era necesario contrastarlo con la intervención municipal para ver si había una fórmula. Y lo que hicimos fue equiparar al modelo de emergencias de servicios sociales, es decir, analizar caso a caso la situación y poder dar una repuesta adaptada a cada caso.Pero eso no era fácil y necesitábamos innovar y plantear un elemento que creemos que no existe en toda España que es un fondo de rescate que da respuestas individualizadas y eso ha requerido ir adaptándonos y mejorando para dar una solución favorable y óptima que ahora ya podemos contar que lo ha sido. ¿Cómo son estas ayuda y en qué consiste que sean progresivas?
Santi Ruiz: Esto quiere decir que no todo el mundo va a recibir el mismo importe. Nos dimos cuenta que en los municipios de alrededor lo que hacían era delimitar la cantidad que recibía cada comercio independientemente de su situación o de su perfil y todos recibían la misma cantidad.Nosotros pensábamos que no todo el mundo tenía una situación igual, sino que cada comercio tenía una situación determinada y eso requería también de una ayuda distinta.Entonces diseñamos dos líneas: una de insolvencia extrema con 3000 euros y otra de insolvencia alta con una cuantía de 1500 euros.Yo creo que a esos comercios que solicitaban la ayuda, les permitía tener ese colchón o ese punto de liquidez que hacía falta en este momento.¿Por qué optáis, como Ayuntamiento, por ese tipo de ayudas en pandemia?
S.R: Fue un poco por ese análisis que hicimos de la situación, de la diversidad de realidades y de intentar que la ayuda no fuera simplemente simbólica de colaboración entre la administración, sino que sirviera para rescatar.No solo un granito de arena sino dar un empujón y un refuerzo para que los comercios que pueden estar en un estado de insolvencia extrema buscándose su futuro, cuenten con 1500 o 3000 euros. Así que pensasen que el Ayuntamiento no solo ha colaborado sino que también me ha permitido tirar hacia delante.Ese era el objetivo, pero no era fácil porque era una realidad novedosa y por eso tuvimos que estructurarlo para que de alguna manera, como hacíamos un análisis caso a caso, que también fuera ágil y saber con eficacia cuáles eran las necesidades de cada uno de los comercios.Y para eso fue necesario crear una línea donde había un equipo técnico reforzado por un experto economista y que tenga la experiencia y la capacidad de, con la documentación más básica necesaria, determinar ese estado de riesgo de insolvencia.Al final el objetivo, y de ahí viene el nombre, es rescatar, no solo ayudar, sino también intentar evitar situaciones de insolvencia. Por eso, configuramos una línea que ha ido progresivamente adaptándose y hemos encontrado la tecla y podemos decir que hemos llegado a un bien nivel y vamos a seguir trabajando.En esta primera convocatoria, se han concedido más del 80% de las solicitudes.
S.R: Exacto, estamos hablando de unas 100 solicitudes y ha hecho que la cuantía que se había destinado para este primer fondo prácticamente se agotara.Estas ayudas empezaron a principios de año y estaban en marcha hasta el 30 de junio. Al principio sí se que se habló de que el plazo de representación de solicitudes fuese corto, pero luego nos dimos cuenta que era mejor que el plazo fuera lo más largo posible porque cada empresa, con el tiempo, se iba a dar cuenta en qué momento le hacía falta pedirlo. En ese momento decidimos que el plazo fuese continuo.Las más del 80% de solicitudes concedidas ha tenido que significar un trabajo ingente de vuestra área para llevarlas a cabo y para concederlas.
S.R: Sí y hay que felicitar al equipo del Ayuntamiento y también el equipo externo con personal del ámbito del ADL, representación del comercio.Se ha hecho un trabajo continuo porque como el proceso de presentación de solicitudes era continuo también había una serie de reuniones periódicas donde iban revisando el expediente y viendo las solicitudes. Si había que requerir algún documento más nos poníamos en contacto con la empresa o comercio.Ha sido un trabajo arduo y de estar pendiente para, al final, ayudar a la gente que lo necesitaba y conseguir que la ayuda llegue en el menor tiempo posible.¿Qué importe ha destinado el propio Ayuntamiento en esta primera convocatoria?
G.L: En esta actuación que acabó el 30 de junio se ha llegado a los 200.000 euros en gasto efectivo y se han destinado 200.000 euros más para ampliar las ayudas hasta el 30 de octubre. La idea era que haya una continuidad en el tiempo porque entendemos que las necesidades de cada comercio y la inquietud y preocupación son cambiantes.Las consecuencias de la pandemia a todo el mundo le afectan, pero a cada uno de una manera determinada. Entonces, la idea era que fuera continuo y para eso requeríamos ampliar el plazo pero también más agilidad para dar respuesta a las solicitudes que vayan presentándose.Por tanto, yo creo que la filosofía de que sea una línea continua hace que estemos siempre abiertos a dar respuesta a las necesidades económicos del sector comercial de Aldaia.¿Qué tiene que hacer un comercio para pedir estas ayudas?
S.R: A través del servicio de comunicación del Ayuntamiento, se puso a disposición de la ciudadanía una explicación de todo lo que tiene que presentar y también hay una dirección de correo disponible para resolver las dudas o preguntas que desde el comercio puedan tener y así el personal del ADL los pueda solventar. Como estamos en un municipio, el trato es muy cercano y se le ayuda en todo el proceso.Con este tipo de ayudas progresivas muchos comercios habrán podido recibir más del Ayuntamiento de Aldaia en comparación con las ayudas que hayan podido dar los consistorios de otros municipios cercanos.
S.R: Exactamente. Un elemento importante es que están las complementarias a las ayudas de la Generalitat, dentro del Plan Resistir. Por tanto, ese efecto ha vendido sumado a ese esfuerzo. En los municipios, como Aldaia, donde los comercios también han recibido el fondo rescate han podido sumar también la ayuda más generalista que se ha planteado desde la Generalitat.Yo creo que al ser un producto innovador o novedosos hemos tenido que ir adaptándolo y mejorándolo porque no teníamos ninguna referencia ni experiencia de algo parecido. Pero, ahora sí que ya podemos plantear que tenemos una solución y una fórmula para rescatar comercios y actividades económicas que lo puedan pasar mal y tenemos la satisfacción de haber arriesgado por no seguir lo ortodoxo y la corriente generalizada de hacer las ayuda lineales.Y por eso estamos satisfechos, ya que pensamos que este momento marcado por la crisis provocada por la pandemia, también es el momento de arriesgar, innovar y buscar soluciones distintas.Eres un alcalde que está a pie de calle ¿qué te han comentado los comercios?
G.L: La sensación que hemos tenido es que esta inyección en algunos casos ha sido importante porque es verdad que nos ha costado perfilar algunas cuestiones y la gente hasta que no las ha recibido no ha detectado la bondad y las ventajas de esta solución. Ahora ya podemos decir que está en la cuenta corriente de cada uno de los comercios que lo han solicitado con ese nivel alto de adjudicación. ¿Cómo se encuentra el sector en esta pandemia y qué papel han jugado estas ayudas para todo el comercio de proximidad de Aldaia?
S.R: Las ayudas han contribuido a hacer un poco ese colchón, ese punto liquidez y ese movimiento económico que se paralizó por la pandemia. Ha permitido tener ese resguardo a los comercios que ha ayudado a no cerrar.El objetivo del Ayuntamiento era que los comercios, por tener unas pequeñas deudas, no tuvieran que cerrar porque eso iba a hacer que el tejido comercial fuera desapareciendo. Entonces, ese refuerzo o ayuda ha servido para aguantar lo mal que lo han pasado porque el comercio y las pequeñas empresas han sido grandes perjudicados en la pandemia.Sí que pensamos que esta pequeña inyección cuando llegaba a las cuentas corrientes de las empresas era un momento de alegría porque el tiempo que pasa desde que la empresa presenta la solicitud hasta que le llega a veces no saben por qué es tan largo, por lo que se ha intentado que ese tiempo de espera fuera lo más corto posible.Esta ayuda les sirve para mantenerse y luchar porque, a parte de ser su trabajo, les gusta y por esta situación se podrían haber visto obligados a cerrar. Y en ese sentido, estamos muy contentos y es lo que hemos percibido, ya que por la calle te lo comentan.En esta primera convocatoria se han destinado más de 200.000 euros, que para un ayuntamiento como Aldaia es una cantidad muy importante ¿Cómo se afronta esa ayuda?
G.L: Es indiscutible que los ayuntamientos, que somos la administración más próxima, no tenemos todos los recursos necesarios para atender todas las necesidades. Pero, era también lógico y compresible que en este momento la prioridad era orientarlo a los sectores donde más dificultades hay.En esa linea, esta solución junto con unas líneas de actuación que hemos hecho junto con la asociación de comerciantes como la creación de un marketplace, un sorteo de 80 tiques de regalo de 300 euros e incluso recientemente la celebración de la pasarela Fashion Night, que es una demostración de que le comercio esta vivo.Por ello, creemos que es momento de apostar por el comercio local, de apoyar el tejido económico del municipio y evidentemente tenemos que destinar los máximos recursos que podamos a ello. En este momento, tiene que ser reactivar ese sector que tan mal lo ha pasado y a la vez dar un mensaje de que estamos cerca de ellos, dando respuestas e intentando afrontar los retos de futuro con fortaleza.¿Qué balance haces como concejal de comercio de unas ayudas que son únicas y progresivas?
S.R: El balance es muy positivo porque al no ser una línea igualitaria creemos que hemos ayudado de diferente manera a quién le hacía más falta. Aquí a nivel comercio también interesa esa diferencia y depende de cada comercio hemos adaptado una respuesta según las necesidades de cada comercio y pequeña empresa.Entonces, en ese sentido estamos bastante satisfechos y de hecho que tenga esa vocación de continuidad en el tiempo, incluso ya cuando la pandemia acabe, que esperemos que sea pronto, y que se instale como una línea permanente porque nos parece una herramienta importante.Y además para activar el tejido comercial también impulsamos el año pasado ya una marketplace con la asociación de comerciantes que ha servido para crear una ventana digital al mundo, porque el escaparate diario es el que observamos cuando paseamos por el municipio, pero también hay momentos por la pandemia en los que no hemos podido salir y ese escaparate se convertía en digital.Un paso necesario y que creemos que hay que dar y en ese sentido también estamos al lado de los comerciantes acompañándoles en el proceso de digitalización de las empresas y los comercios.El análisis caso a caso por el economista Juan Gavilán
Además, este diario pudo entrevistar a Juan Gavilán, experto economista y asesor de las ayudas del Fondo de Rescate de Aldaia que se ha encargado de analizar desde la perspectiva técnica la situación de cada comercio o empresa que solicitaba esta línea de ayudas.¿Cuál ha sido tu papel en estas ayudas tan especiales?
Mi papel ha sido técnico y he tenido que calibrar la situación económica y la viabilidad económica de cada participante en el fondo y ver si éramos capaces de dar una respuesta ágil y eficaz para que ese pequeño comercio y el conjunto del tejido económico de la localidad tuviese una viabilidad en el futuro.¿Qué criterios o requisitos se han tenido en cuenta para conceder las ayudas?
Hemos ido evolucionando. Nos dimos cuenta al principio de la pandemia cuando nos reuníamos por videoconferencia, que cuanta más documentación le pedíamos a la gente más ansiedad le provocábamos.Y al final lo que hicimos es que imperara la lógica, es decir, analizar si el comercio era o no viable, si la persona estaba desarrollando una actividad que se había visto afectada. Y graduábamos su situación de insolvencia en alta o extrema según cómo eran los números.Además, todo el departamento del Ayuntamiento y el equipo colaborador ha sido pesado hasta la extenuación con las personas solicitantes porque no queríamos dejar a nadie fuera y hay que dar las gracias al equipo que tiene el Ayuntamiento porque si no mi trabajo hubiera sido demasiado técnico, y no hubiéramos podido llegar a la cantidad de gente que hemos llegado.Al final, la satisfacción que nos queda a nosotros es que hoy pasees por Aldaia y veas una mercería, una zapatería o un bar abierto.¿Por qué consideras que estas ayudas son más efectivas al comercio frente a otras ayudas más lineales?
El tema principal es que aquí valoramos uno por uno cada uno los candidatos a las ayudas. Es decir, sin ánimo de criticar a cómo lo han hecho desde otras administraciones locales donde ha sido más lineal, aquí hemos querido ser más ambiciosos para realmente ver qué necesidad tenía esa persona.Si tenía dificultades para pagar el alquiler, para pagar a Hacienda, par pagar a los proveedores. Eso es lo que nos ha interesado. Y yo creo que al final el asignar los 1500 o 3000 euros, que para un ayuntamiento como el de Aldaia es mucho dinero, supone una inyección.Eso nos ha ayudado a que siga abierto el pequeño comercio que es el tejido empresarial que tenemos que mantener.¿Estas ayudas suponen el mantenimiento de todo el tejido productivo local gracias a esa baremación de cada negocio?
Evidentemente. Si lo que buscamos es que al final una localidad, pueblo o ciudad pequeña, mantenga su pequeño comercio que, a la vez da vida, eso contribuye a que tengamos una cierta calidad de vida en una ciudad que al final es lo que se busca.Se pretende que la gente esté cómoda en Aldaia y que tengan los medios necesarios para poder desarrollar su vida diaria en la localidad.¿Es complicado como economista tomar la decisión cuando te llega el expediente de un negocio de si puede ser o no rentable aunque ha pasado una crisis como la que estamos viviendo?
Es muy complicado porque el 90% de las solicitudes lo han pasado muy mal y el otro 10% también lo han pasado mal.Pero, el equipo del Ayuntamiento que se puso a nuestra disposición para planificar el trabajo y recopilar la documentación, nos lo puso muy fácil.También es verdad que ha habido momentos que hemos dejado de ser muy técnicos para bajar un poco al barro y ver realmente la situación de una persona.Yo creo que es difícil, en cierto modo, aunque para mí es mas fácil porque no les pongo cara, pero las otras personas del equipo sí porque saben que es la de la esquina.Pero, enseguida éramos muy pro activos todos porque desde marzo hasta junio de este año nos hemos reunido todos los jueves para resolver cuantas más solicitudes mejor porque sabíamos la necesidad que tenía la gente de conseguir la ayuda. ¿Cuántas solicitudes habéis llegado a conceder a esta altura?
A esta altura del año, hemos visto unas 160 solicitudes y hemos concedido casi 80. Y aún estamos recibiendo. La semana pasada, José Manuel, el técnico del ADL me mandó un par más para valorar y esto está vivo. Línea permanente de ayudas más allá de la pandemia
El futuro es que como consistorio vais a mantener una partida importante para que esas ayudas sean permanentes y que cuando un negocio lo esté pasando mal pueda contar con su ayuntamiento.
G.L: La idea es ir dando más pasos adelante. Desde que se inició, hemos mejorado y perfeccionado y la idea es conforme se vaya evolucionando, adaptarnos a la situación que será distinta en su configuración cunado pase este periodo convulso de la pandemia.Y el Ayuntamiento de Aldaia mantendrá una línea que, por motivos diferentes de la pandemia, un comercio debido a un apuro económico necesite una inyección o un socio o amigo aliado que le dé un empujoncito para mantener su actividad. ¿Qué balance haces como alcalde?
G.L: Primero tengo que mostrar mi agradecimiento a todas las personas que han configurado el equipo técnico como José Manuel y Juan que han sido las piezas clave para llevar la teoría a la práctica. Santi y yo lo que hemos hecho es pilotar la vocación de que se implemente la idea.Pero, en realidad, ha sido el equipo técnico los que han hecho posible que ese sueño que tuvimos en marzo de cómo poder ayudar a quién más lo necesita con más ayuda. Gracias a ellos podemos decir que lo hemos conseguido.