La Diputació de València ha iniciado la señalización de farmacias rurales en medio centenar de municipios con un censo inferior al millar de habitantes, atendiendo así una de las reivindicaciones expuestas por la Asociación de Farmacias Rurales-VEC de la Comunitat en la reunión que mantuvo el pasado año con el responsable provincial de Desarrollo Rural y políticas contra la Despoblación, Ramiro Rivera.
El diputado Rivera explica que esta acción coordinada con el área de Carreteras, que se ha encargado de estudiar las ubicaciones y señalizar las farmacias, se ha realizado “atendiendo el mayor riesgo de abandono de negocio y lo que supondría la desaparición del servicio para localidades pequeñas, en las que estas farmacias son fundamentales en su labor de asesoramiento”. En muchos casos, “los responsables de estos establecimientos son el único personal sanitario en los pueblos, y ofrecen una atención complementaria a los centros de salud”, añade Rivera.
La acción se ha iniciado ya en las demarcaciones de Bétera y Villar del Arzobispo, en concreto en las poblaciones de Alfara de la Baronía, Algar de Palancia, Benavites, Segart y La Yesa, y continuará hasta señalizar las farmacias de 51 municipios valencianos, con el objetivo de facilitar su localización a los conductores y visibilizar su presencia a visitantes ocasionales.
La señalización de las farmacias rurales en travesías o accesos de pueblos pequeños, generalmente con una población envejecida, fue una de las peticiones formuladas por el colectivo durante la reunión mantenida el pasado año con los responsables de la Diputació, como medida efectiva para mantener la viabilidad de negocios fundamentales para las personas que habitan estos municipios.
Colaboración con el Colegio de Farmacéuticos
En paralelo a esta acción conjunta de Desarrollo Rural y Carreteras para mejorar la visibilidad de las farmacias rurales, el área provincial de Bienestar Social que dirige Pilar Sarrión coordina el convenio firmado entre la Diputació y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Valencia (MICOF), mediante el cual la corporación aporta 30.000 euros, la misma cantidad asignada por el MICOF en el proyecto de sostenibilidad de estas farmacias y de las denominadas VEC, viabilidad económica comprometida.
Con las ayudas concedidas por la Diputació y el MICOF a las farmacias rurales y VEC, los establecimientos pueden destinar un 50% a mejoras y adecuaciones de la oficina de farmacia, renovación de material informático, gastos de alquiler y suministros como agua, luz y teléfono. El otro 50% de la ayuda se dedica a la formación y educación a la ciudadanía, que compromete al beneficiario a realizar actividades que mejoren la atención sanitaria de los pacientes del municipio.
Diputació, MICOF y Asociación de Farmacias Rurales-VEC tienen claro que, desde la perspectiva de la despoblación, resulta necesario mantener y aumentar la inversión pública en este tipo de servicios, sean públicos o privados, teniendo en cuenta el ámbito de actuación y las competencias de cada institución. La existencia de una farmacia es importante a la hora de abandonar o instalarse en un municipio rural, razón por la que se tiene presente en las políticas contra la despoblación en las que trabajan entes públicos como en este caso, la Diputació.