Cs ha decidido abstenerse finalmente este miércoles en la votación de los presupuestos de la Generalitat para 2021 y rechazar la ley de medidas fiscales o acompañamiento a las cuentas, al no prosperar la bajada de impuestos que ha ido modificando en las últimas semanas para adaptarse a los grupos del gobierno valenciano.
"Ha sido completamente imposible", ha lamentado el líder de Ciudadanos, Toni Cantó, sobre el apoyo de Compromís y Unides Podem. No en el caso del PSPV, del que ha agradecido especialmente la "voluntad" del 'president' de la Generalitat, Ximo Puig, y el conseller de Hacienda, Vicent Soler, y ha prometido mantener este "camino de confianza".
Su última oferta, presentada este martes, consistía en una reducción de entre el 0,15% y el 0,5% del tipo aplicable a tres de los cuatro tramos más bajos del IRPF y una subida del 0,25-0,5% a los tres primeros a partir de 50.000 euros. Así calculaba que se beneficiarían el 99% de los valencianos mientras el impacto negativo en las arcas de la Generalitat se vería compensado con la subida aprobada por el Botànic para los más ricos.
Las negociaciones entre Cs y el Botànic han ido avanzando con varias reuniones entre Cantó y Puig. En la ley de presupuestos han 'arrancado' propuestas como un fondo Covid con 76 millones en ayudas directas para sectores afectados, la contratación de 500 enfermeras y 250 médicos, la creación de 2.000 plazas en residencias de mayores (1.500 mediante colaboración público-privada), un bono de comercio, ocho millones para el turismo o la ampliación del 'Bono Viatge CV'.
El voto telemático se ha cerrado a las 11 horas de este 23 de diciembre, tras lo que la votación final de las dos leyes arranca a las cuatro de la tarde en el último pleno de Les Corts de 2020.
"TRAICIÓN" DE COMPROMÍS Y PODEM
Tras decidir la abstención, Cantó se ha mostrado satisfecho por el trabajo "muy duro" de su grupo en los últimos meses y ha criticado que Compromís y UP lo hayan "boicoteado traicionando el espíritu de los pactos de reconstrucción". "Lo que han hecho es simplemente destrucción", ha aseverado en declaraciones antes de la junta de síndics.La bajada de impuestos para la clase media y trabajadora era un "gesto" que cree que los valencianos merecían en esta situación, al igual que en otros países de Europa mientras "España no lo hace". "Hemos estado a punto", ha lamentado reprochando que la coalición y el grupo 'morado' "dicen defender a los trabajadores y demuestran que no les importan en absoluto".
A su juicio, para Compromís y Unides Podem lo importante no era el qué, sino el quién, por que "no querían que Ciudadanos estuviera en la ley más importante que se vota cada año" aunque la bajada de impuestos "se ha negociado de forma conjunta".
Cantó, por contra, ha dado "sinceramente las gracias" a Puig y al conseller de Hacienda por su "voluntad de llegar a un acuerdo hasta última hora", ya que ha hablado con ellos "hasta esta misma mañana justo antes de la votación". "Imaginad cómo ha sido la cosa de intensa", ha constatado.
A partir de ahora, ha garantizado que seguirá "tendiendo la mano al tripartito y especialmente a Ximo Puig, que ha hecho esfuerzos para centrar al gobierno", con el objetivo de que Cs siga "siendo útil como en la Diputación de Alicante, donde está centrando al PP". Mientras, ha insistido, "otros parece que solo están preocupados por destruir".
"HEMOS CUMPLIDO HASTA EL FINAL"
"Hemos iniciado un camino de colaboración de forma leal: nos hemos sentado y ellos lo han reconocido", ha destacado asegurando que el titular de Hacienda estaba "muy agradecido por la seriedad de Ruth Merino y Tony Woodward", sus dos diputados que han ido negociando las cuentas. Y ha recalcado: "Hemos cumplido con nuestra palabra hasta el último momento".Por todo ello, el síndic 'naranja' ha puesto en valor la "aproximación" de los socialistas y ha avanzado que su "idea" es escenificar el acercamiento mediante la abstención a los presupuestos, además de confiar en que "este camino de confianza puede seguir dando frutos".