Ciudadanos presentó ayer una moción en les Corts Valencianes para pedir que los docentes interinos que no tienen la capacitación lingüística en valenciano puedan seguir impartiendo clases en las zonas castellanohablantes que están reconocidas en la Llei d'Ús i Ensenyament del Valencià. En total son casi 2.000 los profesores que no han accedido a las bolsas de trabajo por no poder acreditar su nivel de valenciano.
La propuesta fue presentada por la síndica del grupo parlamentario, Mari Carmen Sánchez, tras la reunión que había mantenido con varias decenas de profesores que se encuentran en estas circunstancias.
Uno de los puntos que incluye esta iniciativa es que las plazas de especial dificultad sean ofertadas "preferentemente" a este colectivo del profesorado, además de que insta al Consell a poner en marcha un plan para "posibilitar la cualificación lingüística" de los docentes teniendo en cuenta "la diversidad territorial".
La situación de este colectivo se entiende con una Orden del gobierno del Partido Popular en 2013 que regula la necesidad de la capacitación lingüística en determinados puestos de trabajo docentes en centros dependientes de la Generalitat. Sin embargo, se decidió que se empezara a aplicar cuatro años después, el pasado 1 de septiembre de 2017. Aún así, la portavoz de Ciudadanos lamentó que la actual Conselleria adjudicara las plazas en julio, "dejando fuera a casi 2.000 docentes interinos por falta de capacitación en valenciano".
"Hay personas que llevan más de 36 años en el sistema educativo y por un requisito lingüístico no se les puede expulsar de la bolsa", opinó la diputada de Ciudadanos Merche Ventura. Por eso, la parlamentaria instó a "reflexionar" al Consell y a que readmita a las personas "que ha expulsado del sistema". Y en ese sentido, pidió que los 15 millones de euros presupuestados para la promoción del valenciano se dediquen a la formación de los profesionales.