El Pleno de Catarroja ha aprobado por unanimidad el destino del superávit de 2017. En total, más de 2,5 millones de euros que se dedicarán a inversiones financieramente sostenibles y a la reducción de la deuda bancaria.
Concretamente, se ha dado luz verde a la inversión de más de 1,2 millones de euros en nuevos proyectos, a propuesta del Equipo de Gobierno y los grupos de la oposición. La mayor parte del presupuesto se destinará a la renovación de los colectores. Así, una partida de 300.000 € servirá para cambiar el alcantarillado de la avenida Diputación, después de que las obras de reurbanización de la zona descubrieron su mal estado. Aun así, este no será la única calle donde se intervendrá: alrededor de 100.000 € más irán destinados a renovar la red de saneamiento de varios barrios del municipio.
La piscina cubierta municipal también recibirá una importante parte de las inversiones. Para la rehabilitación de la terraza se invertirán 180.000 € y en la adecuación del sótano, 100.000 € más. En este momento, el sótano de la piscina se usa como almacén pero el Ayuntamiento valorará la posibilidad de reconvertirlo en un aparcamiento.
Asimismo, el consistorio invertirá 100.000 € en los túneles de la calle Pelayo y la Ronda Este, actualmente pendientes de ejecución. La intervención permitirá solucionar los problemas que ocasionaban las lluvias intensas y mejorarán la seguridad de los túneles de acceso al centro urbano.
Por otro lado, está previsto que 40.000 € sean invertidos en el estudio e implantación de la recogida selectiva de la materia orgánica. También los colegios públicos recibirán una parte del superávit, puesto que 30.000 € se destinarán a trabajos de mantenimiento y adecuación de los centros escolares.
Además de todo esto, las inversiones también servirán para recuperar el empedrado histórico de varias calles del barrio de Las Barracas y para poner en marcha el proyecto de participación para reurbanizar del Camino de les Corregudes, así como el proyecto de remodelación de la calle Paluzié.