El Consejo Regulador del Cava pidió la semana pasada al Gobierno de España que limitase en el resto del territorio español el crecimiento de la superficie de viñedo dedicada al cava a 0,1 hectáreas en los próximos tres años. La exigencia del Consejo, controlado principalmente por productores catalanes, supondría un duro golpe al sector valenciano de la viña.
Del total de 36.000 hectáreas reconocidas que hay en España, 29.000 se encuentran en la región de Cataluña. Le sigue la región de Requena-Utiel con 4.000 y, por detrás se encuentra la región de Almendralejo (Extremadura), con 1.400 hectáreas. El resto se reparten en las zonas de La Rioja y Ribera del Duero. Con estos datos sobre la mesa, lo cierto es que el sector del espumoso en nuestra Comunitat vive una auténtica y apresurada expansión.
En los 80, su producción era mínima, pero en 2016 se alcanzaron las seis millones de botellas. Este año, otra vez, se volverán a superar récords con hasta siete millones de botellas. Y en Navidad, se prevé vivir una campaña histórica en la que la producción crecerá el doble que la anterior. Y esta proyección se mantiene para el año que viene.
Además, el veto que intenta poner el Consejo amenaza unas inversiones que alcanzan los 5,6 millones de euros. Es lo invertido por las bodegas valencianas en la reconversión de 450 hectáreas para la producción de cava. Por ello, los viticultores están pendientes de la decisión que tome el ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, encabezado por Isabel García, que se pronunciará previsiblemente pasadas las elecciones catalanas, para evitar tensar el ambiente.
Unanimidad contra la limitación
En la Comunitat -concretamente en Requena-, el sector del cava se encuentra en una fase de expansión que "se encuentra lejos de haber tocado techo", tal y como asegura AVA-ASAJA, por lo que considera "injustificadas" las pretensiones del Consejo Regulador. Su dirigente, Cristóbal Aguado, denuncia que la petición tiene que ver "con el conflicto suscitado en torno a las tensiones secesionistas en Cataluña y al efecto negativo que pueden tener sobre las ventas de cava catalán en el resto de España".Entre los grupos políticos, el que ha encabezado la denuncia ha sido el PSPV, a través de su síndic en les Corts, Manolo Mata. El socialista mostró su preocupación y aseguró que "no vamos a consentir que se penalice ni obstaculice el gran trabajo que los agricultores y viticultores de la zona de Requena ha realizado para situar el cava valenciano entre los mejores de España". "Estamos hablando del futuro de la comarca", añadió.
Desde el grupo han presentado una proposición no de ley en les Corts para instar al Gobierno de Rajoy a no aceptar la exigencia de las bodegas catalanas. Pero este debate se producirá seguramente pasadas las Navidades, quizá cuando el Ejecutivo ya haya tomado una decisión.
También desde les Corts, todos los partidos con representación han suscrito una declaración institucional en la que instan al ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente a no ceder a las presiones que llegan desde Cataluña.