La calle Virgen del Olivar tendrá aceras más anchas y una nueva red de evacuación de lluvias

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Esta mañana han arrancado las obras de reurbanización de la calle Virgen del Olivar. En unos meses la calle contará con una nueva red de saneamiento pluvial que mejorará la evacuación de las lluvias, tendrá aceras más anchas y una nueva red de agua potable. La reurbanización, con un presupuesto de 344.926,96 y un plazo de ejecución de cinco meses, persigue, entre otros objetivos, aumentar la calidad urbana del entorno, mejorar las condiciones de habitabilidad y salubridad, mejorar la accesibilidad para personas de movilidad reducida, mejorar la imagen urbana, racionalizar las zonas de aparcamiento y mejorar la movilidad peatonal del barrio. Las obras, previstas en el plan de mejoras 2018-2019 están financiadas con fondos de la Diputación de Valencia.

El alcalde Jesús Ros, la concejala de Urbanismo, Inma Amat, junto a otros miembros del equipo de gobierno y técnicos del consistorio, presentaron ayer a los vecinos de la calle y del barrio los detalles del proyecto, recogieron sus planteamientos y resolvieron sus dudas. El primer edil reconoció que las obras “son una molestia para todos”, pero recordó que se trata de una intervención para “mejorar la calidad de vida de los vecinos” y tratar de solucionar los problemas de inundaciones en la zona.

El proyecto de remodelación opta por unas aceras más accesibles y seguras para los transeúntes tanto a pie como en vehículo. Se van a demoler los pavimentos de las aceras para su reforma, según la nueva alineación, que permitirá mantener los recorridos de peatones con el ancho mínimo establecido por la normativa vigente en materia de accesibilidad. Según esta norma, las aceras de la calle tendrán como mínimo 1,50 metros.

Otra de las acciones que se va a llevar a cabo es la renovación de la red de agua potable con las correspondientes acometidas domiciliarias. La red actual aún cuenta con tuberías de fibrocemento. Se instalará una nueva red elaborada en fundición con las características adecuadas.

La calle Virgen del Olivar es una de las vías más afectadas por las lluvias torrenciales. Por ello, se instalará una nueva red de conducción trazada a lo largo de toda la calle con un diámetro de medio metro. Se instalarán también diversos imbornales, estratégicamente situados en los cruces de las calles y en aquellos puntos que prevean embolsamiento o que sean óptimos para la recogida de agua. La red conectará con la ubicación de agua existente en la calle San Nicolás.

Esta es la primera de las obras que se van a llevar a cabo en el centro histórico, a la que seguirán otras actuaciones como la remodelación de la Plaza de las Fuentes y las calles adyacentes (Santo Domingo y Massanassa) o la reurbanización del barrio del Alter.

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